A nivel global, nuestro país ya emitió cerca del 60% de la nueva deuda tomada por los “países emergentes” durante 2016, y la deuda neta emitida ya equivale al 8% del PBI.

La Argentina se está dando “un atracón de bonos” tituló hace unas semanas la Daily Bussiness Review. Y los estudios de abogados, asesores e intermediarios, un atracón de comisiones mientras la deuda externa crece día a día.

El estudio estrella en los procesos de endeudamiento del último año de las provincias argentinas tiene como socio a Norberto Eladio Quintana, el hermano del vicejefe de Gabinete, Mario Quintana. Holland & Knight LLP fue el intermediario para el endeudamiento de Salta, Chubut, Mendoza y la provincia de Buenos Aires. El hermano menor del vicejefe de Gabinete es socio del estudio desde el año 2004 y se presenta a sí mismo como un “experto en haber ayudado a distintos fondos en complejos procesos de reestructuración de deuda”.

Entre el marketing del estudio y la información periodística, es fácil rastrear el volumen del negocio de la deuda:

“El pasado 12 de mayo, la Provincia argentina de Mendoza colocó un bono por USD 500 millones, con vencimiento en 2024, en los mercados internacionales. En esta operación, la Provincia contó con la representación legal de Cabanellas, Etchebarne & Kelly y Holland & Knight LLP.”

“La provincia argentina de Salta colocó en los mercados internacionales un bono de USD 300 millones a 9,125 % y vencimiento en 2024 […] en ella Cabanellas, Etchebarne & Kelly (en Argentina) y Holland & Knight LLP (en EE.UU.) asesoraron a la Provincia”.

“La provincia argentina del Chubut emitió internacionalmente títulos de deuda por USD 650 millones. […] En esta operación, la Provincia fue asesorada por Holland & Knight LLP (Nueva York y Florida)”.

“Cleary Gottlieb, Holland & Knight LLP and Cabanellas Etchebarne asesoraron sobre ofertas de bonos recientes de la Argentina. […] están representando a la provincia argentina de Buenos Aires, en otra emisión de bonos de $ 1 mil millones y una emisión de $ 300 millones de la Provincia de Salta.

“Holland & Knight LLP y Linklaters asesoran a una provincia argentina en una oferta de $ 500 millones en una de las primeras operaciones desde que el país retornó a los mercados internacionales de crédito”.

Los documentos no señalan cuál es la comisión que cobra el estudio por la colocación de la deuda, pero estos porcentajes suelen ser varias veces millonarios.

Mario Quintana, accionista de Farmacity, Pegasus y varios fondos de inversión norteamericanos, está imputado en la causa del dólar futuro por haber sido uno de quienes compró dólares y participó luego de las decisiones acerca de su devaluación que le dieron enormes ganancias. Como Secretario de Coordinación Interministerial, dependiendo directamente del Jefe de Gabinete, Marcos Peña, tiene entre sus principales funciones la de colaborar “en la gestión del financiamiento externo y las relaciones con los organismos multilaterales de crédito”, según señala en su página de presentación.

Desde allí, es el encargado de sugerir y contratar a los estudios de abogados que gestionarán el endeudamiento nacional y de las provincias. Negocio que ha caído repetidamente en el estudio de su hermano.

Norberto Eladio es el menor de tres hermanos, vive en Nueva York con su pareja y el hijo de ambos y, tal vez sólo coincidentemente, se llama Eladio Quintana, como el padre del presidente Manuel Quintana, uno de los precursores del endeudamiento externo argentino. Quintana, ultraliberal presidente de principios del siglo XX, llevó en apenas meses la deuda externa a 120 millones de libras. Y se salvó apenas del atentado de un anarquista que intentó asesinarlo.

Pero Norberto Eladio Quintana no es el único hombre cercano al gobierno que hace negocios con el endeudamiento del país y las provincias.

Un poco para Rocío

La Resolución 181/16, que complementa el Decreto 798/16 sobre la colocación de deuda de la provincia de Salta, menciona: “En el marco de la Transacción, la Provincia le ha solicitado al Banco (Banco Macro) la contratación de (i) Cabanellas, Etchebarne, Kelly, quienes actuarán como asesores legales locales de la Provincia (los “Asesores Legales Locales de la Provincia”) y a Holland & Knight LLP, como asesores legales internacionales de la provincia…”.

En dicho convenio, y tal como puede observarse en el mismo texto, se incluye asimismo al Estudio Bruchou, Fernandez Madero & Lombardi como asesor legal local del Consorcio (Banco Maro, Citi, DB): “La aceptación de la Propuesta por parte de la Provincia implicará la total y plena conformidad de la misma a la contratación del Citi y a DB (Deutsche Bank) por parte del Banco, con el cual conformará el Consorcio, para que, por si y/o a través de sus entidades afiliadas locales y/o del exterior, se desempeñe únicamente como agente estructurador, organizador y colocador de los Títulos de Deuda en el mercado internacional, asi como del Estudio Bruchou, Fernandez Madero & Lombardi como asesores legales locales del Consorcio…”.

Bruchou, Fernandez Madero & Lombardi es un estudio que asesora a grandes compañías financieras locales e internacionales al que Macri benefició, a pocos días de haber asumido, con el nombramiento de Rocío Balestra[1] como Directora de la Comisión Nacional de Valores (CNV). Esta abogada trabajó 14 años y medio en dicho estudio, habiendo trabajado además en Shearman & Sterling, estudio que el Gobierno sumó para la negociación con los fondos buitres en diciembre último.

Si bien la emisión de deuda la misma Resolución 181 indica en la propuesta del DB junto con Holland & Knight que sus honorarios ascienden a US$ 60.000, la comisión de la operación para el Consorcio (Banco Macro, Citi, DB) asciende a 0,5% sobre el valor nominal de los bonos, es decir, unos US$ 350 millones. En concreto, representan US$ 1,75 millones (27 millones de pesos al tipo de cambio actual) solo para este caso.

Hipotecando el futuro

La emisión de deuda ha sido la única política sostenida por el actual gobierno desde que asumió en diciembre del año pasado para paliar los efectos de la megadevaluación, la baja de impuestos a las corporaciones y el campo y la caída del consumo y la producción.

Hasta aquí, dado la escasa llegada de inversiones sumada a la mayor fuga de capitales de los últimos cinco años (US$ 10 mil millones netos en lo que va de 2016) y el fracaso del “blanqueo”, el endeudamiento en divisas es el mecanismo de financiamiento principal impulsado por el gobierno de Cambiemos. A pesar de que el propio Secretario de Finanzas Luis Caputo mencionó hace unos días atrás que “la suba de la deuda no es una preocupación”, los datos indican que durante 2016 el país tomó 64 mil millones de dólares de deuda bruta, equivalente al 15% del PBI. Fueron US$ 34 mil millones netos, equivalentes al 8% del PBI. El destino de estos fondos es harto conocido: financiar la fuga, engrosar momentáneamente las reservas y re-pagar deuda. Y en el camino beneficiar con comisiones, premios, contratos y bonos al sector financiero vinculado al gobierno.

A pesar de que el propio Secretario de Finanzas Luis Caputo mencionó hace unos días atrás que “la suba de la deuda no es una preocupación”, los datos indican que durante 2016 el país tomó 64 mil millones de dólares de deuda bruta, equivalente al 15% del PBI.

Tal como indica el Informe Panorama Financiero publicado por CEPA en septiembre último, “del endeudamiento bruto, sólo el 11,4% fue contraído por el sector privado, mientras que del 89% restante fue adquirido por el sector Público: las provincias tomaron el 9,2% y la Nación el 79,4%. Si se contrastan estas emisiones con otros países se observa que nuestro país emitió cerca del 60% de la nueva deuda tomada por los “países emergentes” durante 2016”.

En lo que respecta a las provincias, la política “federal” de Cambiemos ha sido ofrecer endeudamiento para enfrentar el deterioro creciente de las arcas provinciales. La preocupación principal reside en que las mismas se han visto deterioradas por la caída de la actividad por doble vía: la recaudación provincial crece por debajo de la inflación, al igual que las transferencias por coparticipación. Es decir, el endeudamiento se orienta finalmente al financiamiento del déficit provincial.

Según el Observatorio de Deuda del ITE German Abdala, el detalle de las deudas emitidas por las provincias es el siguiente: