Milei se subordina a Macri: el gobierno en manos del “padrino PRO”

Javier Milei oficializó el control de Mauricio Macri en áreas clave del Gabinete y admitió públicamente su dependencia del expresidente.

El núcleo de poder de la Casa Rosada reconfiguró su arquitectura tras la aparición de Mauricio Macri con una influencia determinante. En su última entrevista con Luis Majul, Milei admitió que tomará “de la mejor de las maneras” las sugerencias de Macri y que ya abrió el Gabinete a los cuadros elegidos por el expresidente, especialmente en Seguridad, Defensa y Salud. El gobierno libertario parece así entregarse a la vieja estructura PRO y cede la conducción de la gestión diaria en áreas críticas.

La revelación implica un cambio significativo en la gobernabilidad y la dinámica interna: Macri no solo asesora, supervisa y recomienda—ahora interviene y define estrategias que antes el propio Milei defendía como “independientes”. En fuentes políticas, la definición fue clara: Milei se convierte en el rostro visible, mientras el poder real y la toma de decisiones recaen ahora en el exmandatario, quien coloca su gente en las carteras más sensibles.

Una Casa Rosada bajo tutela

En la práctica, la coalición de gobierno trasciende los límites originales de La Libertad Avanza y se fusiona con el PRO, bajo la conducción activa de Macri: las reuniones a solas, las “consultas” directas y el monitoreo en temas clave desdibujan la frontera institucional. Los analistas advierten que se trata de una transferencia tácita de las riendas del Ejecutivo, que blinda a Milei pero lo debilita frente a su electorado y su propio espacio.

Esta subordinación es vista como la mayor novedad política tras la salida de Espert y la crisis interna: los radicales quedan aislados, el peronismo descolocado y las promesas de autonomía libertaria ya parecen, apenas diez meses después de la asunción presidencial, una anécdota para la historia.

Reflexión crítica y proyección

El nuevo esquema pone sobre la mesa interrogantes centrales: ¿Cuánto puede durar un gobierno cuya legitimidad se diluye bajo la sombra de un “tutor” externo? ¿Qué pasa con el propio voto libertario? Las próximas semanas mostrarán si la capitulación de Milei ante Macri blinda la gobernabilidad o anticipa una crisis mayor.