La causa por presunto enriquecimiento ilícito contra Cristian Ritondo está en manos del fiscal federal Eduardo Taiano. Al mismo tiempo, su hijo Federico es socio comercial de dos figuras clave del riñón político del propio Ritondo: su ahijado político Matías Pantanali y su mano derecha histórica, Matías Ranzini.

Una causa sensible y un fiscal bajo sospecha

El fiscal Eduardo Taiano tiene a su cargo una denuncia por presunto enriquecimiento ilícito contra Cristian Ritondo, jefe del bloque PRO en Diputados y aliado clave del gobierno de Milei. La denuncia fue presentada por la diputada Mónica Frade (Coalición Cívica) tras una investigación de Emilia Delfino en elDiarioAR sobre el patrimonio del dirigente y las sociedades offshore vinculadas a su esposa, Romina Diago.

Pese a la gravedad de los hechos y al volumen de información publicada por la prensa y por el propio Centro Latinoamericano de Investigación Periodística (CLIP), la causa lleva un año prácticamente “planchada”, según describe Volosin en su newsletter La Justa.

El hijo del fiscal en la trastienda del ritondismo

El corazón de la investigación de La Justa apunta a Federico Nicolás Taiano, hijo del fiscal. En su reconstrucción, Volosin detalla que Federico, de 39 años, inició su carrera judicial en el juzgado federal de Ariel Lijo y luego saltó a una serie de cargos políticos y corporativos estrechamente vinculados al entorno de Cristian Ritondo.

• Fue asesor en la Legislatura porteña cuando Ritondo era vicepresidente primero.
• Trabajó en la Corporación Buenos Aires Sur, históricamente ligada a punteros del ritondismo en la zona sur de la Ciudad.[web:416]
• Ejerció como director provincial en dos cargos distintos en el Ministerio de Seguridad bonaerense durante la gestión de María Eugenia Vidal, bajo el mando directo de Ritondo.[web:443]
• Más tarde, ya en tiempos de Milei, llegó a la Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE) en un área sensible: bienes decomisados y patrimonio estatal.

En paralelo a esos cargos, Federico armó sociedades comerciales con dos personas que, en los hechos, integran el núcleo duro de confianza de Ritondo: Matías Pantanali y Matías Ranzini.

Socio del ahijado político de Ritondo

El 7 de marzo de 2022, Federico Taiano constituyó junto a Matías Pantanali y Claudio Sosa Iglesias la sociedad “M y C Hermanos SRL”, vinculada al negocio de venta de carne. El dato figura en el Boletín Oficial y fue rastreado por La Justa en la documentación mercantil.

¿Quién es Pantanali? Volosin lo describe como el hijo de Ester “Niti” Iglesias, histórica referente territorial de la Comuna 8, sindicado en la nota como “puntero” clave del ascenso político de Ritondo y actual vice de una organización para el “desarrollo” que administra recursos y personal en el sur de la ciudad.[web:416] En sus redes, Pantanali se refiere a Ritondo como su “jefe”, su “amigo” y alguien con quien “compartió toda una vida”.

Es decir: el hijo del fiscal que debe investigar a Ritondo por enriquecimiento ilícito es socio de quien se presenta, públicamente, como ahijado político del propio diputado, en una sociedad comercial constituida en 2022 y con negocios en carne y franquicias (“compramos una franquicia de RES y luego la revendimos”, dijo Federico a La Justa).

Otra sociedad con la mano derecha de Ritondo

La investigación también muestra que Federico Taiano no sólo es socio del ahijado político de Ritondo, sino también de su mano derecha histórica: Matías Ranzini.

Ranzini fue jefe del bloque PRO en la Cámara de Diputados bonaerense y, antes, subsecretario de Asuntos Institucionales del Ministerio de Seguridad provincial, cargo que en la práctica lo convertía en viceministro de Ritondo durante la gestión Vidal.[web:410] Más recientemente, se aseguró un asiento como director del Banco Provincia en la negociación entre Axel Kicillof y el bloque macrista/libertario por el presupuesto provincial.

El 22 de mayo de 2020, al finalizar la gestión de Vidal, Federico y Ranzini crearon la sociedad “RT Consultores y Asociados SRL”. Ante la pregunta de La Justa, el propio Federico confirmó que “RT” significa “Ranzini y Taiano”.

Volosin revela además que, en 2021, Federico replicó casi el mismo nombre para crear una sociedad en Estados Unidos: “RT Strategies LLC”, registrada en el estado de Delaware el 24 de septiembre de 2021, a la que luego le abrió una sucursal en Washington DC el 1 de octubre de ese mismo año.[web:416] Consultado sobre el motivo del nombre, contestó que usó las mismas siglas porque venía de armar la SRL con Ranzini y le “resultaba sencillo acordarse”.

El hijo del fiscal aseguró que la LLC no tuvo cuentas ni bienes a su nombre, que la cerró en 2024 y que la registró a través de un tercero, diciendo no saber por qué se constituyó en Delaware y no en la propia capital estadounidense.

Un conflicto de interés que ya preocupa a otras causas

La nota de La Justa coloca este entramado societario y político en un contexto más amplio: Eduardo Taiano tiene un largo historial de decisiones polémicas o inacciones en causas de alto voltaje político, desde los sobreseimientos por enriquecimiento de Néstor y Cristina Kirchner sin apelación en los 2000, hasta la lentitud en expedientes que hoy comprometen a la administración Milei, como la causa por la represión que casi mata al fotógrafo Pablo Grillo o el caso de la criptoestafa $LIBRA.

En paralelo, otros medios ya habían señalado el problema de que un hijo del fiscal trabajara políticamente con Ritondo. ElDiarioAR, en su unidad de investigación, explicó que la diputada opositora Paula Oliveto pidió que otro fiscal intervenga, precisamente porque “un hijo del fiscal Taiano fue funcionario de Ritondo entre 2016 y 2019, cuando este era ministro de Seguridad bonaerense”.

Documentación, trazas y una pregunta central

Volosin acompaña su newsletter con el link a la documentación completa: constitución de sociedades en el Boletín Oficial, registros de Delaware y Washington DC, organigramas de ministerios y empresas públicas, así como recortes que exhiben la proximidad política entre Ritondo, Pantanali y Ranzini.

A partir de todos esos datos, la pregunta institucional es obvia: ¿puede un fiscal seguir a cargo de una causa por enriquecimiento ilícito contra un dirigente político cuando su propio hijo es socio y exfuncionario directo de los hombres de máxima confianza de esa misma persona?

El Código Procesal Penal argentino prevé causales de excusación y recusación cuando existen vínculos que puedan afectar —o aparentar afectar— la imparcialidad de jueces y fiscales. La propia Volosin sugiere que, al menos, el caso amerita discutir seriamente si Eduardo Taiano debería apartarse de la investigación sobre Ritondo para preservar la confianza pública en el proceso.

Fuente principal: Natalia Volosin, newsletter La Justa, edición “El hijo del fiscal Taiano, que debe investigar a Ritondo, tiene sociedades con su círculo íntimo”, 12 de diciembre de 2025.