
Como ante el triunfo de Kirchner en 2003, la crisis del campo o la muerte del ex presidente, la salud de Cristina hizo que los voceros del poder intentaran condicionar al gobierno y colar su agenda.
Redacción En Orsai // Lunes 07 de octubre de 2013 | 14:01
“¿Estará la Presidenta en condiciones físicas de concluir su mandato?”, se pregunta retóricamente Joaquín Morales Solá en el diario La Nación, ante la “colección subdural crónica” sufrida por Cristina Fernández de Kirchner.
Y esa sugerencia de que la presidenta debería renunciar directamente -explicitada en el discurso editorial de varios medios- encuentra antecedentes similares en otros momentos de crisis política o debilidad aparente del gobierno.
Aquí, enumeramos algunos antecedentes de intentos de condicionar, hacia adelante, la marcha del gobierno kirchnerista:
-2003: Néstor Kirchner era un candidato inesperado, desconfiable para el establishment y que asumió la presidencia con la debilidad de haber obtenido solo el 22% de los votos. Por eso, el subdirector del diario La Nación, Claudio Escribano, escribió que “la Argentina ha resuelto darse gobierno por un año”.
Salvo, aclaraba Escribano, que Kirchner aplicara un pliego de condiciones que él mismo detallaba: alineamiento automático con Estados Unidos, encuentro con el embajador y los empresarios, condena a Cuba, reivindicación de la guerra sucia y medidas excepcionales de seguridad.
-2009: Después de perder las elecciones legislativas ante Francisco de Narváez en la provincia de Buenos Aires, una derrota generada en parte por la dura crisis del campo, Morales Solá pronosticaba que el oficialismo “tendrá que parcelar el gabinete entre los gobernadores peronistas si quiere conservar el gobierno”.
-2010: Horas después de la inesperada muerte de Kirchner, el analista Rosendo Fraga también intentó condicionar el rumbo del gobierno de Cristina.
“Tiene la oportunidad de modificar, rectificar, corregir, cambiar una serie de aspectos, estilos, orientaciones y políticas impuestas por su marido, que llevaron a una situación inédita, que un gobierno con la economía creciendo al 9% tenga la aprobación de sólo uno cada tres”, escribió.
Al año siguiente, cabe recordar, Cristina Kirchner consiguió la reelección con el 54% de los votos.
En su memorable editorial, Fraga recomendaba: distanciarse de Moyano, ceder ante los reclamos de la Mesa de Enlace, recomponer la relación con la Iglesia, distanciarse de sus aliados de “la izquierda” y desistir de aplicar plenamente la Ley de Medios.