Las patronales agropecuarias cordobesas se quejan de las exigencias para ingresar a territorio puntano en medio de la pandemia del coronavirus, por lo que el domingo protestaron en el límite interprovincial y amenazaron con bloquear los puestos de control de San Luis. Antes, ya se habían manifestado el lunes anterior con un corte en la ruta 7 y habían vuelto a reunirse el viernes, cuando decidieron la protesta del fin de semana.

"El tránsito por las rutas de la provincia está garantizado desde siempre, no obstante es indispensable para poder hacerlo cumplir con la normativa vigente, que sólo está inspirada en cuidar y proteger nuestro estatus sanitario", expresó el gobierno de Alberto Rodríguez Saá en un comunicado, en el que también mostró su preocupación por el incremento de casos tanto en Córdoba como en Mendoza.

Según el gobierno puntano, hasta el momento han ingresado a San Luis más de 5.000 personas, de las cuales 700 son productores rurales. Actualmente, hay 377 personas realizando la cuarentena en los lugares dispuestos a tal fin. Y el esquema de control en los puestos limítrofes ha permitido detectar 20 casos positivos de coronavirus.

Durante la protesta del domingo, que fue liderada por productores cordobeses que tienen campos en San Luis, se vivieron momentos de tensión al producirse empujones y forcejeos con los policías que impedían el paso en el lugar. Algunos manifestantes tiraron arena desde un camión para imitar, del lado cordobés, los bloqueos que hay del otro lado.

En este marco, los Partidos Comunistas remarcaron que "la embestida se convierte, claramente, en un globo en ensayo que apunta a bloquear la vía interoceánica, por la que transitan más de tres mil camiones diarios, con lo que afectarán, gravemente, el comercio internacional, en particular de los parques industriales de San Luis y Villa Mercedes, como así también el abastecimiento de la población".

"El nuevo plan, que recuerda a uno viejo, va más allá y no puede disimular las mañas desestabilizadoras de la Mesa de Enlace, que nunca olvida su sueño golpista contra los poderes populares. Está claro que Confederaciones Rurales Argentinas, la entidad madre de las Sociedades Rurales del interior del país, no quiere pagar el impuesto extraordinario y así lo hizo saber su presidente, Jorge Chemes, porque poco les importa el hambre del Pueblo y su objetivo es sólo exportar, al menor costo y a la mayor ganancia", aseveraron.

"¿Qué harán los gobiernos provinciales de Córdoba, San Luis y Mendoza y el propio gobierno Nacional? ¿Reaccionarán protegiendo a los más débiles o cederán ante las acciones destituyentes?Advertimos sobre la gravedad de la situación, pues el Pueblo bien sabe, por dolorosa experiencia histórica, que ceder frente a las insaciables, angurrientas e irresponsables presiones de la derecha, siempre dejó un luctuoso saldo de miseria, dolor y muerte para el pueblo trabajador, que masivamente votó al Frente de Todos, con la esperanza de una vida mejor", consideraron.

También recordaron que "actuar significa impedir que se bloqueen nuestras rutas, dejando sin alimento y asistencia a un Pueblo que sólo tiene ante sí un desolador panorama, donde el coronavirus lo espera a menos de dos metros de distancia, para contagiarlo, y está a la vista que le resulta mucho más fácil matar a un pobre que a un rico".

Finalmente, reclamaron que "el gobierno nacional lidere una acción que garantice la libre circulación en nuestras rutas nacionales, el abastecimiento de nuestros pueblos y nuestras ciudades y el no avance de una derecha que aprovecha la conciencia de las masas populares y su apoyo a las medidas sanitarias propuestas por el gobierno del Frente de Todos para ganar el espacio público".