Mientras la dirigencia de Juntos por el Cambio comienza a tomar distancia de la situación de su legisladora provincial, dos policías que intervinieron en el caso luego de que Carolina Píparo y su esposo atropellaran a jóvenes motociclistas afirmaron bajo juramento que ella y Juan Ignacio Buzali "vomitaban y tenían fuerte olor a alcohol".

La declaración complica la situación de la funcionaria de La Plata y diputada bonaerense por la oposición, que en las últimas horas vio como la estrategia para zafar de la causa podría fracasar de forma estrepitosa y hasta derivar en una imputación por doble tentativa de homicidio e incluso detención Buzali, quien presuntamente manejaba el coche Fiat 500 al momento del hecho. El dato de la declaración de los policías lo disparó el periodista Raúl Kollman en C5N.

Asimismo, la Justicia tiene prácticamente descartado que los dos motoqueros atropellados en la madrugada del 1 de enero hayan participado del presunto asalto denunciado por la pareja.

En tanto, fuentes judiciales aseveraron a la agencia Télam que "no hay absolutamente ningún indicio" que relacione al motociclista Luis Levalle y a su acompañante, de 17 años con el robo denunciado por Píparo y Buzali. Además, la fiscal platense a cargo de la causa, María Eugenia Di Lorenzo, contaría con un video en el que se ve a los posibles autores del asalto, quienes aún no fueron identificados.

A su vez, por pedido de la Justicia, personal de la Dirección Departamental de Investigaciones (DDI) La Plata allanó el Centro de Operaciones y Monitoreo (COM), ubicado en diagonal 80 y calle 5 de esa ciudad, para secuestrar las grabaciones de las cámaras de seguridad de cuando ocurrieron los hechos.

Al respecto, la Municipalidad de La Plata detalló en la noche del lunes en un comunicado que fueron entregados 73 DVDs con 400 horas de filmación, los libros de guardia y los datos de todo el personal que trabajó el 31 de diciembre y el 1 de enero último. Resta comprobar si tienen el mismo grado de edición bochornosa que los segundos que se habían dejado trascender horas después de los hechos.