En el día de ayer la oposición organizó otra marcha más que terminó en un rotundo fracaso. Esta vez la protesta se organizó frente a Casa Rosada y debió terminar con la intervención de personal policial.

Los manifestantes en una actitud antidemocrática comenzaran a arrojar piedras y antorchas encendidas por encima de la reja al histórico edificio de Balcarce 50.

Exaltados y acompañados por los medios como La Nación+ que transmitían los sucesos cuando el presidente de la Nación salía de Casa Rosada para ir al Centro Cultural Kirchner (CCK), donde encabezaría una actividad de la CELAC.

Los vándalos arrojaron al menos dos antorchas encendidas por encima de la reja que separa la casa de Gobierno de la Plaza de Mayo con lo cual deberían haber sido detenidos de inmediato, pero la Policía de la Ciudad, como siempre en estos casos, brilla por su ausencia.

Paradójicamente, en la semana en que el periodista Roberto Navarro fue denunciado ante la justicia supuestamente por incitar a la violencia por marcar estos hechos que deben ser detenidos de una vez por todas. Ellos, los verdaderos violentos ayer arrojaron además de antorchas encendidas, colocaron una representación de una horca, en medio de banderas argentinas.

Debieron intervenir los bomberos para apagar el fuego provocado, se reforzó el vallado y se hicieron presentes efectivos de la Policía Federal para evitar mayores delitos contrala propiedad pública.