el ídolo de una generación, incluso parte de la mía, no sólo por afecto sino por la magnífica creatividad, por la insólita creatividad de la música que nos deja para siempre

“Es muy difícil para mí dirigir la palabra a este recinto en una oportunidad tan lamentable como la presente”, comenzó Rinaldi su intervención en la sesión de la Legislatura porteña.

“Por esas casualidades de la vida he conocido a este protagonista de hoy que por fin logrará su descanso definitivo. Desde chico, hice lazos amistosos casi familiares; lo acercaron a mi casa donde fue el ídolo de mis hijos, el ídolo de una generación, incluso parte de la mía, no sólo por afecto sino por la magnífica creatividad, por la insólita creatividad de la música que nos deja para siempre”, describió Rinaldi.

“La música tiene esas virtudes: acalla y aplaca los ánimos y al mismo tiempo nos hace pensar, pensar en que una vida tan injustamente retraída para un cúmulo de agresividades que se nos viene encima de la cabeza y que desde su creatividad hubiera podido apaciguar, acallar”, se lamentó la actriz.

“Gustavo Cerati fue lo que dirían en otros países y relacionados totalmente y definitivamente a la disciplina que abordaba en permanencia, sería nombrado como un genio insólito en esta parte del mundo y no nos sorprendería como nos sorprende a veces la genialidad que tenemos que aceptar que los otros fuera de casa reconocen a tanto músico creador que ha podido generar tanta bulla en defensa de esa música”, reivindicó.

Visiblemente emocionada, Rinaldi dijo sentir un profundo lamento, envió sus condolencias a la familia del músico, “y sobretodo a alguien que dio permanentemente: su madre; en relación a que la vida tenía que volver a su cauce en la persona de Gustavo Cerati”.

“Todo mi respeto a Gustavo y todo mi respeto, como sigo teniendo, en favor de un bien común que a veces respetamos muy poco que es la música argentina. Pido por favor un minuto de silencio en su homenaje”, finalizó.