La compañía Shell Argentina confirmó que está estudiando desprenderse de sus activos de refinación y comercialización de combustibles en la Argentina "en el marco de una revisión estratégica de su negocio a nivel mundial"
Raúl Möller // Jueves 08 de septiembre de 2016 | 13:30
Lejos de celebrar la llegada de inversiones foráneas, el macrismo se agarra la cabeza ante el inminente exilio de una de las principales petroleras del mundo que, no conforme con haber recibido todo tipo de ventajas y de haber ubicado a un ex gerente y accionista millonario como Ministro de Energía, evalúa reducir sus costos operativos en el país.
Shell Argentina emitió un comunicado en el que advierte sobre un nuevo rumbo corporativo y la tangible posibilidad de llevar a cabo una "revisión estratégica" en la zona. "En respuesta a las circunstancias globales de nuestra industria y los objetivos detrás de nuestra combinación con BG (British Gas) , estamos llevando a cabo una revisión estratégica solamente de nuestro negocio de Downstream y sus activos en el país. Estos incluyen la Refinería Buenos Aires, nuestra red de estaciones de servicio (alrededor de 600), Trading & Supply, Químicos y los negocios de Global Commercial, incluyendo GLP, Aviación, Marítimo y Lubricantes"
Sin embargo el comunicado deja abierta una puerta para dejar una pata en el país "Nuestros intereses en el negocio de Upstream (exploración y explotación de hidrocarburos) y sus activos en la Argentina están fuera del alcance de la revisión estratégica" prometen. "Consideramos que nuestras inversiones globales de shale son prioridad de crecimiento futuro a partir del año 2020 y, por lo tanto, estamos comprometidos con el desarrollo y crecimiento de nuestro negocio de no convencionales en la Argentina en los años venideros (Vaca Muerta)".