
Si bien hace algunas décadas emprender un negocio parecía una osadía que pocos podrían sortear, hoy lo vemos como una oportunidad. Transitamos un momento en que la estabilidad no es algo seguro y, ante esa situación, parece mejor tomar las riendas de nuestra economía
Lunes 23 de enero de 2023 | 08:26
Es cierto, sin embargo, que debemos tener cierta cautela para montar un negocio exitoso frente a un mercado altamente competitivo en todas las áreas. Por eso, al momento de planificar la apertura comercial, es gestionar algunas variables importantes que harán el camino más sencillo.
Como inspiración, en esta nota reparamos siete aspectos que es necesario resolver antes de dar inicio de actividades con una PyME.
Si bien el rigor de postergar el cumplimiento de nuestras obligaciones se hace presente muchas veces, las consecuencias son muchas. Por eso, es lo primero que debemos resolver.
Debemos contemplar el inicio de actividades en AFIP, habilitación del espacio y facturación. De tener empleados, conviene sumar un sistema de liquidación de sueldos, que podemos encontrar haciendo clic aquí . Con este tipo de plataforma vas a poder automatizar las liquidaciones de sueldos, crear fórmulas personalizadas, entre otras funcionalidades.
Nunca está de más realizar un estudio de mercado, contexto, población objetiva y problemáticas que resuelvan aquello que ofrecemos, además del presupuesto y planificación. Revisando todos estos aspectos, podremos tener una idea de la viabilidad del negocio tal como lo estamos proyectando.
Antes de abrir a la comunidad nuestro negocio, es clave tener en claro cuál es el perfil de nuestra marca. Para eso, podemos pensar qué sistema de valores la sostiene.
Como inspiración, es pensar útil en la historia que llevó a gestar la idea y la comunidad que buscamos construir. También es importante desarrollar una filosofía de trabajo.
Conocer el capital de inversión real es fundamental antes de iniciar actividades. Con ello, es posible planificar los gastos de inicio de actividades, promoción y ejercicio. De no cuadrar, podemos desarrollar una agenda de recaudación, pensar en posibles sociedades, etc.
Si bien pareciera que los métodos de promoción son el último vagón del tren, lo cierto es que debemos contemplar la estrategia desde el momento inicial. Así, al momento de diseñar el perfil, planificar la inversión y desarrollar ideas tenemos en cuenta cómo vincularlos con contenidos de difusión.
Identificar desde un principio el alcance de un negocio será útil para determinar su viabilidad y desarrollar la planificación. Lo primero es reconocer cuál es el objetivo público y cómo llegar a él.
Otro aspecto importante es el flujo de ventas que pensamos que debemos sortear, región que abarcar y formas de promoción. Sabiendo esto, podremos resolver cuestiones logísticas que tienen que ver con el presupuesto y la planificación.
Teniendo en cuenta todo lo anterior, es importante llevar adelante una planificación que posibilite ordenar las acciones y, sobre todo, ser realistas para evitar la frustración. En ese sentido, es conveniente hacer una proyección larga (anual, por ejemplo) dividida en segmentos posibles de evaluar y reformular.