La IGJ detectó graves ilícitos por parte de Dakota
Grúas de Larreta
noticiaslainsuperable.com.ar // Jueves 23 de febrero de 2023 | 13:29
Grúas de Larreta: a pesar de pagar un canon irrisorio la empresa simulaba perder millones y fugaba ganancias
(Por Guillermo Carlos Delgado Jordan) Dakota SA, la firma dirigida por Marcelo Violante, aquel que mantenía amistosos y turbios «chats» con el ministro de Justicia y Seguridad de Horacio Rodríguez Larreta, Marcelo D’Alessandro, asegura que perdió millones de pesos, registrando perdidas en la mayoría de los años en los que estuvo al frente del acarreo de los vehículos en infracción en la Ciudad de Buenos Aires. Todo ello a pesar de pagar un canon irrisorio y «congelado» mientras, en paralelo, te subían las multas.
Una serie de inspecciones llevadas adelante por la Inspección General de Justicia (IGJ) puso de manifiesto una serie de irregularidades e ilícitos que determinaron que la misma promueva, a través de la Resolución Particular 94/2023, una acción judicial de nulidad contra la empresa, amparada en el artículo 19 de la ley 19.550 que dictamina que «se procederá a su disolución y liquidación a pedido de parte o de oficio» cuando la sociedad, Dakota en este caso, «realizare actividades ilícitas«.
Dakota inició sus actividades en 1958, en el área de la Obra Pública pero despegó en 1990, cuando se enfocó en el negocio del estacionamiento en la Ciudad de Buenos Aires. Durante el gobierno de Carlos Grosso, a través de esta firma, el ingeniero paraguayo Reinaldo Niella Varesini (hoy fallecido) se hizo en 1990 con todo el acarreo de autos de 557 manzanas ubicadas de Viamonte para el norte. Y complicidad del ejecutivo porteño mediante, no lo soltó hasta mediados de este año, cuando se hizo mediático el escándalo que ya se conocía: que pagaban un canon ridículo, congelado desde hace años, y que la levantaban en pala (en grúa, mejor dicho).
Desde 2014, por un negocio multimillonario, Dakota pagaba mensualmente al gobierno de Mauricio Macri primero, y Horacio Rodríguez Larreta después, un total de $55.000.- En paralelo, la tasa de remoción (lo que cobraban por auto «levantado»), que en ese momento eran 350 pesos, se incrementaba exponencialmente, siendo para 2022 (cuando se desató el escándalo y Larreta no tuvo otra que retirarles la concesión) de 6.525 pesos. O sea, con nueve autos removidos en unas horitas, ya pagaban el alquiler y le sobraban unos pesos.
A pesar de estas excepcionales ventajas, en Dakota, aseguran, perdían plata. «Bien es cierto que la absurda suma abonada al Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires en materia de canon por los servicios de acarreo y grúa conforme los términos de una licitación vencida hace 21 años ( 55.000 pesos mensuales, suma invariable durante años ) hace presumir la existencia de colosales ganancias a la sociedad licitataria, pero aunque parezca mentira, ello no ha sido así “formalmente”, pues la sociedad Dakota SA registró pérdidas en los ejercicios cerrados los días 31 de Julio de 2002 ( $ 4.622.362,65 ); 31 de Julio de 2003 ( $ 506.191,94 ); 31 de Julio de 2004 ( $ 45.299,47 ); 31 de Julio de 2005 ( 254.621,57 ); 31 de Julio de 2006 ( $ 1.267.903,47 ); 31 de Julio de 2009 ( $ 816.178,66 ); 31 de Julio de 2011 ( $ 1.306.920,85 ); 31 de Julio de 2013 ( $ 2.055.709,19 ); 31 de Julio de 2014 ( $ 3.010.898,20 ); 31 de Julio de 2018 ( $ 33.849.608,71 ); 31 de Julio de 2019 ( $ 58.243.155,75 ) y 31 de Julio de 2020 ( $ 43.880.485,37 ). Si a ello se le suma que la ganancia del ejercicio cerrado el 31 de Julio de 2021 fue sólo de pesos 1.345.038,47, la pregunta que debe formularse necesariamente es cómo y de qué manera, la sociedad Dakota SA – o el Sr. Marcelo Daniel Violante, lo que hoy es exactamente lo mismo – pudo evitar entrar en disolución por pérdida de su capital social; y la respuesta se encuentra, precisamente, en la total opacidad que caracteriza sus estados y registros contables«, aseguran desde la IGJ.
Según aseguran desde el mismo organismo, para «dibujar» estas pérdidas, a Dakota le «bastaba con no informar sobre los resultados de cada ejercicio en cada acta de asamblea ordinaria celebrada en los términos del artículo 234, incisos 1º y 2º, de la ley 19550, eliminando toda referencia al monto de las pérdidas, o, de igual modo y en la misma línea espuria, evitar absorber con tales pérdidas las cuentas positivas del patrimonio neto, lo cual se evitaba con el mero y remanido recurso de trasladar dichas pérdidas a la cuenta de resultados no asignados, y, fundamentalmente, proceder, para evitar tener un patrimonio neto negativo, a la actualización de su activo mediante revalúos técnicos nunca conformados por esta INSPECCIÓN GENERAL DE JUSTICIA, lo cual constituye una actuación ilegítima que dio lugar a la declaración de irregularidad e ineficacia a los efectos administrativos por parte de la IGJ de los estados contables correspondientes a los ejercicios económicos cerrados los días 31 de Julio de 2014 a 31 de Julio de 2021, último presentado a esta autoridad de control«.
A esto se suma los «honorarios desproporcionados» cobrados por Marcelo Violante como Director de la firma -a pesar de la existencia de pérdidas-, mientras los otros directores, en simultáneo y regularmente, renunciaban a cobrar.
Otro dato llamativo que encontró la IGJ refiere a una deuda millonaria en dólares pagada por la empresa en los últimos años. Según aseguran los libros de Dakota, Ana Elízabeth Bruyn, la viuda de Niella Varesini, tras el fallecimiento de su esposo, aparece donando un «aporte irrevocable» a la sociedad para pagar una deuda de 1.874.072 dólares a un banco extranjero, en mayo de 2022, algo que parece más que nada una artimaña para fugar ganancias encubiertas. La IGJ citó a Bruyn a una audiencia para dar explicaciones por este aporte, pero la mujer no se presentó.
Por eso, ante estas y otras irregularidades encontradas, la IGJ sentenció «una hipótesis de simulación en la sociedad que autoriza la promoción de una acción de nulidad» contra la empresa que, en los sucesivos gobiernos del PRO, desfalcó el bolsillo de los porteños en clara connivencia con las autoridades.