
El actual presidente Alejandro Slokar garantizó su sucesión en Ana María Figueroa y retorna a la Sala II junto a Ángela Ledesma, donde se encuentran radicadas las causas que más preocupa al PRO. Carlos Mahiques fue desplazado a la Sala III
Cambios en casación: Ana María Figueroaes la sucesora de Alejandro Slokar
Martes 13 de diciembre de 2022 | 23:05
Cambios en casación: Ana María Figueroaes la sucesora de Alejandro Slokar
Como es habitual en el mes de diciembre, la Cámara Federal de Casación Penal eligió nuevas autoridades y dispuso la integración de sus Salas para el año 2023. En el acuerdo general convocado este martes, resultó designada Ana María Figueroa para presidir en 2023 el máximo tribunal penal del país.
Contra lo que había sido publicado durante el fin de semana por los medios hegemónicos, Mariano Borinsky no fue elegido como presidente. Fuentes del tribunal indicaron que, en rigor, Borinsky nunca tuvo garantizados los votos de sus colegas y, a último momento, terminó resignando su candidatura asumiendo los diversos cuestionamientos de varios sectores.
La Cámara de Casación también dispuso la integración de las Salas para el año 2023, con algunos cambios. La Sala III y la Sala IV, mantienen su composición. En tanto la Sala II, que interviene en las causas que preocupan al PRO, vuelve a contar con Alejandro Slokar, que se suma a Angela Ledesma y Guillermo Yacobucci. El cuestionado Carlos Mahiques -ex ministro de justicia de Vidal y “Huemul”, entre otras afiliaciones- termina en la Sala I.
Concluido el acuerdo, Slokar obsequió una bandera nacional y un presente ecológico con motivo del 30° aniversario de la Cámara
Mientras el gobierno de Javier Milei desfinancia a las Abuelas de Plaza de Mayo, una inesperada ola de jóvenes comienza a acercarse a la organización impulsados por la serie El Eternauta. Estela de Carlotto celebra el fenómeno cultural como un acto de memoria colectiva,…
El colapso del consumo, la devaluación brutal y los tarifazos hicieron desaparecer más de mil panaderías en apenas un año y medio. La venta de pan se derrumbó un 50% y la de facturas, un 78%. Miles de trabajadores quedaron en la calle. El hambre ya ni siquiera se disfraza con mate cocido y un pedazo de pan.