En el encuentro del BRICS en Brasil, Cristina Kirchner cuestionó a los fondos buitre y afirmó que "se debe terminar con esta suerte de pillaje internacional en materia financiera". El antecedente Drago.
Andrés Brown - Redacción En Orsai // Miercoles 16 de julio de 2014 | 14:09
La presidenta Cristina Fernández de Kirchner participa de la primera cumbre entre los presidentes de la Unasur y del Brics que se desarrolla en Brasilia para estrechar lazos entre el bloque de potencias emergentes y los países de la región.
Cristina está acompañada por el ministro de Economía, Axel Kiciloff; la ministra de Industria, Débora Giorgi; el canciller Héctor Timerman; el secretario de Comunicación Pública, Alfredo Scoccimarro; la titular del bloque de diputados del FpV, Juliana Di Tulio; y el senador por San Juan, Ruperto Godoy. La delegación aterrizó en Brasilia minutos antes.
Los presidentes de los países que integran el Brics y sus pares de la Unasur mantienen el primer encuentro entre ambos bloques, con el objetivo principal de estrechar los lazos entre esta región y el bloque de potencias emergentes.
Los mandatarios del bloque conformado por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica se reúnen con los jefes y jefas de Estado de la Unión de Naciones Suramericanas en el palacio Itamaraty, como se conoce a la sede de la cancillería brasileña situada en esta ciudad.
"Creemos que se debe terminar con esta suerte de pillaje internacional en materia financiera", destacó Cristina.
"Hoy vamos a dar un paso muy importante. Ayer se dio uno aquí en Brasil y dimos otros desde la Unasur cuando constituimos el Banco del Sur", sostuvo la mandataria en referencia a los anuncios de la creación de un Banco de Desarrollo y un fondo de contingencia que se realizaron ayer en Fortaleza durante la VI cumbre del Brics.
"Van surgiendo cada vez más instituciones que cuestionen este funcionamiento de los Organismos Multilaterales que en lugar de dar soluciones no hacen más que complicar la vida de los pueblos", agregó la Presidenta en referencia al Fondo Monetario Internacional y al Banco Mundial.
En su mensaje ante los militantes brasileños que se acercaron a saludarla, Cristina les agradeció por acompañar las políticas que se llevan adelante desde Argentina y en toda la Patria Grande.
"Es muy importante, sobre todo ustedes que son los jóvenes, presente y futuro, no pueden permitir que les hipotequen las esperanzas, las ilusiones y los sueños de un Brasil mejor, de una América del Sur mejor y de un mundo mejor, un mundo atravesado por la violencia", les dijo.
De fondo, la actual situación judicial de la Argentina frente a los fondos buitre plantea la necesidad de repensar una nueva normativa internacional sobre las deudas soberanas.
El caso argentino referencia directamente a la teoría Drago (por el abogado y excanciller argentino Luis María Drago), que desarrolló la doctrina de que no se puede aplicar la fuerza de un Estado para el cobro forzoso de una deuda sobre otro Estado.
La "Doctrina Drago" fue expuesta en 1903, a razón de un bloqueo naval a Venezuela de 1902-1903, con el objetivo de cobrar por la fuerza una deuda que el presidente de ese entonces del país latinoamericano Cipriano Castro se negaba a pagar.
La posición del gobierno nacional, que busca negociar sin dejar de mostrar la situación de chantaje al que lo conduce la ausencia de reglas internacionales, apunta en perspectiva histórica a una nueva doctrina sobre el tema.