MASACRE DE AVELLANEDA

Alberto Santillán: “Lijo no permitió que se investigara a la bonaerense”

Alberto Santillán, padre de Darío, el militante asesinado pro la policía bonaerense en el Puente Pueyrredón, dijo que "el juez Ariel Lijo archivó la causa contra Duhalde, Solá y todos los demás”.

Alberto Santillán: “Lijo no permitió que se investigara a la bonaerense”

Andrés Brown - Redacción En Orsai // Martes 26 de agosto de 2014 | 14:15

Los políticos que mandan a reprimir y a matar tienen que ser condenados también

 

Alberto Santillán, padre de Darío, en comunicación con Radio La Plata (FM 90.9) se refirió a la marcha recordando a los militantes barriales: “Hoy a las 12, damos una conferencia de prensa donde seguimos denunciando al juez Lijo, quien archivó la causa contra Duhalde, Solá y todos los demás”.
“Doce años del asesinato de mi hijo es un tiempo más que largo para ver que la clase política está involucrada en todo esto, por eso seguimos denunciando la desidia del juez Lijo, que no le permitió al fiscal Osorio investigar a la policía bonaerense. Lijo responde a una clase política que se cree impune. Nosotros, por honor a Darío y a Maxi, vamos a seguir denunciando esto”, afirmó.
En igual sentido, analizó: “Esperemos que alguna vez podamos condenar a los políticos que mandan a reprimir y matar a nuestros dirigentes sociales. Si logramos eso, vamos a presentar un precedente más que claro y los políticos tendrán que cuidarse porque no pueden seguir impunes. Los políticos que mandan a reprimir y a matar tienen que ser condenados también”.
“Nunca hubo voluntad por parte de la justicia. En las reuniones con el fiscal Osorio pensábamos que era él quien no quería seguir investigando, pero tenemos más que claro, después de leer parte de la causa, que Lijo buscó que no se toque a los políticos. El Juez sigue encubriendo a quienes tuvieron que ver con el asesinato de Darío y Maxi, políticos que siguen pululando y pretenden seguir representando a la sociedad”, confió Santillán.
Respecto su sensación ante la candidatura de Felipe Solá, el padre de Darío señaló: “me genera impotencia, mucha bronca, yo jamás sentí odio, pero ahora odio estas situaciones, odio a estas personas. Encima dicen que hicieron una buena gobernación. Como también Duhalde en su momento dijo que en su gobierno jamás hubo muertos sociales”.
“Estar después de 12 años en la calle es para que estos personajes nefastos no sigan mintiendo y lo que tenemos que instalar es la memoria colectiva de que lo que pasó en Avellaneda tiene culpables. El hecho de que se presente Solá como si nunca hubiese pasado nada en su gobernación es una caradurez”, aseveró.
En relación al significado de Maxi y Darío para nuestra sociedad, respondió: “Es una bisagra en la historia. Una bisagra en la cual Duhalde se quería perpetuar en el poder y tuvo que entregarlo antes de tiempo por la manifestación de toda la sociedad por lo que había pasado en la estación”.
Finalmente, sobre la Ley Antipiquetes, Alberto Santillán dijo a Radio La Plata  (FM 90.9): “Los gobiernos nunca han querido que haya manifestaciones, pero el giro que está tomando este gobierno hacia la derecha está llamando la atención. Por más que saquen leyes, las protestas no se sacan más de las calles. Los gobiernos tienen que abrir las persianas de las fábricas para darle laburo a la gente y todo esto va a cambiar”.

“Seguimos denunciando la desidia del juez Lijo, que no le permitió al fiscal Osorio investigar a la policía bonaerense. Lijo responde a una clase política que se cree impune. Nosotros, por honor a Darío y a Maxi Kosteki, vamos a seguir denunciando esto”, afirmó Alberto Santillán a Radio La Plata.

En igual sentido, analizó: “Los políticos que mandan a reprimir y a matar tienen que ser condenados también”.

La causa por las responsabilidades políticas de la Masacre de Avellaneda se inicio el 1 de julio de 2002 por Mabel -mamá de Maxi- y apuntaba como autores intelectuales de los asesinatos al ex presidente Eduardo Duhalde y en la que también se menciona a Carlos Ruckauf, Alfredo Atanasof, Juan José Alvarez, Aníbal Fernández, Carlos Soria, Oscar Rodríguez, Jorge Matzkin, Felipe Solá (entonces gobernador) y Luis Genoud, quien era funcionario de Seguridad provincial en ese entonces y ahora es miembro de la Corte bonaerense.

El juez Lijo, protagonista de la escena político y judicial a partir de la causa Ciccone, estuvo a cargo de la investigación sobre la Masacre de Avellaneda, que lleva 12 años sin avances.

“Lijo buscó que no se toque a los políticos. El Juez sigue encubriendo a quienes tuvieron que ver con el asesinato de Darío y Maxi, políticos que siguen pululando y pretenden seguir representando a la sociedad”, confió Santillán.

Respecto a la precandidatura de Felipe Solá a gobernador bonaerense por parte del Frente Renovador massista, el padre de Darío señaló: “Me genera impotencia, mucha bronca, yo jamás sentí odio, pero ahora odio estas situaciones, odio a estas personas. Encima dicen que hicieron una buena gobernación. Como también Duhalde en su momento dijo que en su gobierno jamás hubo muertos sociales”.

“Estar después de 12 años en la calle es para que estos personajes nefastos no sigan mintiendo y lo que tenemos que instalar es la memoria colectiva de que lo que pasó en Avellaneda tiene culpables. El hecho de que se presente Solá como si nunca hubiese pasado nada en su gobernación es una caradurez”, aseveró.

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