(Redacción EnOrsai - @EnOrsai) "Nosotros nos pronunciamos como familiares de genocidas, y ella proviene del mismo núcleo duro que nosotros", destacó Kalinec al abordar la controvertida figura de Villarruel. Esta afirmación apunta directamente a la raíz del problema: Villarruel, al igual que Kalinec y otros miembros de "Historias Desobedientes", es parte de una generación que vivió de cerca los horrores de la dictadura militar argentina. Sin embargo, mientras algunos eligen confrontar ese pasado oscuro y abogan por la justicia, otros, como Villarruel, han optado por una dirección completamente diferente.

Kalinec enfatizó la incapacidad de Villarruel para romper con el "pacto de silencio" que ha rodeado a los crímenes de la dictadura militar en Argentina. Para aquellos que han experimentado de manera directa o indirecta los abusos y la brutalidad de esa época, el silencio es inaceptable. Es un pacto que impide que la verdad y la justicia prevalezcan, y Villarruel, al albergar ese silencio, se convierte en un símbolo de la negación y la falta de responsabilidad.

La entrevistada también compartió sus experiencias personales en relación con la lucha de los organismos de derechos humanos. Subrayó cómo esta lucha la ha llevado a rechazar la reivindicación de un marco ideológico vinculado a la dictadura. "Este acto es bochornoso y nos obliga a discutir nuevamente cuestiones que parecían resueltas", señaló. Es evidente que la lucha por la memoria, la verdad y la justicia continúa siendo un compromiso fundamental en la sociedad argentina.

La conversación también abordó el papel de Kalinec como hija de un genocida y cómo esa experiencia personal la llevó a cuestionar las explicaciones simplistas que se ofrecieron en ese momento. Recordando su primer acercamiento a estas cuestiones, compartió cómo las detenciones de su padre llevaron a preguntas ineludibles. En aquel momento, le dijeron que se trataba de un gobierno de "zurdos revanchistas". Sin embargo, subrayó la importancia de respaldar el dolor de las víctimas, independientemente de su relación personal con los perpetradores.

En su crítica a Victoria Villarruel, Kalinec hizo un llamado para que rompa con el silencio y abogue por la justicia en relación con los crímenes de los genocidas. También advirtió sobre el oscuro futuro que podría esperar si ciertos actores llegan al poder y la necesidad de generar conciencia en la sociedad.

???? No todos los familiares de genocidas defienden el terrorismo de Estado.

???? Las integrantes de "Historias debidas" enseñan que es posible revertir el legado del horror por el del amor a la vida y la justicia.

???? Serie completa en @SomosContar y en nuestro canal de YouTube. pic.twitter.com/kZq3qqnU7j

— Canal Encuentro (@CanalEncuentro) September 4, 2023

En cuanto a Javier Milei, Kalinec lo describió como un personaje mediático que atrae a ciertos sectores poco comprometidos, pero enfatizó la importancia de mantenerse alerta. La situación política y social de Argentina sigue siendo volátil, y la voz de aquellos comprometidos con la justicia y la verdad es más importante que nunca.

Finalmente, Analia Kalinec destacó el impacto positivo que el colectivo "Historias Desobedientes" ha tenido al ayudar a otros familiares, incluidos nietos de genocidas, a alzar la voz y buscar información que sus propias familias no les proporcionan. La organización se ha convertido en un faro de esperanza para aquellos que buscan respuestas y justicia en medio del oscuro legado de la dictadura militar.