(Por Redacción EmOrsai - @EnOrsai) La base de esta visión es la idea de que los ciudadanos en situación de asistencia social son "víctimas del sistema", un matiz que Milei subraya al afirmar que no eliminará la asistencia social hasta que la actividad económica se estabilice. La propuesta plantea un enfoque multifacético, donde se busca cambiar tanto el sistema de salud como el sistema educativo a través de remuneraciones adecuadas y enfoques experimentales.

En paralelo, la creación de un sistema de vouchers o cheque educativo se plantea como una manera de que los padres, en teoría, puedan elegir entre instituciones de gestión pública y privada. Esta medida busca fomentar la competencia y otorgar a los padres la capacidad de tomar decisiones informadas sobre la educación de sus hijos. Algo que en la práctica sería imposible ante el derecho de admisión que ejercen las instituciones.

En términos de salud, la plataforma de La Libertad Avanza propone una reforma profunda que abarca desde la descentralización de las derivaciones hospitalarias hasta el arancelamiento de todas las prestaciones y la colaboración entre el sector público y privado en la autogestión del servicio. Además, plantean cambios significativos en la ley de salud mental, el sistema de guardias y las residencias médicas.

La propuesta económica, con la intención de eliminar el Banco Central y promover la "competencia de monedas" que permita a los ciudadanos elegir libremente el sistema monetario o incluso la dolarización. La eliminación de retenciones a las exportaciones, derechos de importación y la unificación del tipo de cambio son otras de las propuestas presentadas para promover la libertad económica y la inversión. Un coctel de propuestas que en el primer análisis profetisa un descalabro económico ante la retirada del estado de los mercados.

El planteo de este conjunto de reformas que abarcan desde lo social hasta lo económico, para transformar aspectos fundamentales de la sociedad argentina plantea serias dudas de un proyecto que hasta el momento sólo parece creíble para aquellos que sueñan con cobrar en dólares.