Uno de los denunciantes más destacados ha sido Juan Carlos Blumberg, reconocido empresario y padre de Axel Blumberg, quien fue secuestrado y asesinado en 2004. Blumberg aseguró que La Libertad Avanza llegó a cobrar hasta 50 mil dólares por una candidatura a concejal. Apuntó directamente contra los armadores del partido, Carlos Kikuchi, Sebastián Pareja y Karina Milei, acusándolos de haber convertido la política en un negocio lucrativo.

Carlos Eguía, periodista y excandidato a gobernador de Neuquén por La Libertad Avanza, también hizo revelaciones sobre el presunto sistema de lucro personal dentro del partido. Según Eguía, desde Buenos Aires le exigieron que otorgara los mejores lugares en la Legislatura de Neuquén a personas que nunca trabajarían en la provincia. Al confrontar a los responsables, Eguía recibió respuestas evasivas y justificaciones ambiguas.

Otro exmiembro destacado de La Libertad Avanza, Carlos Maslatón, quien fue uno de los armadores políticos del partido, ha advertido sobre lo que él llama "régimen del franquiciado político". Maslatón sostiene que Milei utiliza su figura y popularidad para beneficiar a otros candidatos, pero a cambio de una suma de dinero. Según Maslatón, este sistema se asemeja a una concesión empresarial, donde se exige un pago inicial y se obtienen beneficios económicos a través de contratos de empleo público.

Varios dirigentes y militantes también han denunciado situaciones similares de presión y coacción dentro de La Libertad Avanza. Rebeca Fleitas, legisladora porteña del partido, afirmó que le exigieron el control total de su despacho y los contratos de su personal. Otros testimonios señalan que los armados electorales se realizan exclusivamente por motivos económicos o incluso sexuales.

Ante estas acusaciones, Milei ha negado las imputaciones y las ha atribuido a una estrategia de desprestigio de la "casta periodística". Sin embargo, reconoció que sus candidatos deben hacer una contribución económica, comparándolo con el financiamiento público de las campañas. En un tuit, Milei afirmó que en su espacio solo permanecen aquellos dispuestos a invertir y desafió a que se realicen todas las denuncias que sean necesarias.

La compraventa de cargos en La Libertad Avanza ha generado un escándalo político y socavado la imagen del partido, que se presenta como una alternativa anti casta. Las acusaciones de enriquecimiento y negocios oscuros han puesto en tela de juicio la coherencia entre los discursos y las prácticas del partido, generando dudas sobre la verdadera naturaleza de su propuesta política.

Fuente: Página12