Sergio Massa, junto a su equipo de Economía, ha presentado un ambicioso proyecto destinado a reformar el impuesto a las ganancias en Argentina. La propuesta, que busca una modificación significativa en este tributo, ha sido anunciada con el objetivo de aliviar la carga fiscal de un amplio segmento de la población, especialmente de los trabajadores asalariados y jubilados.

La esencia de la iniciativa es transformar la estructura del impuesto a las ganancias para que solo aquellos con ingresos notoriamente elevados se vean afectados por el mismo. La idea fundamental es que una vez que esta reforma sea aprobada por el Congreso, únicamente los ingresos superiores a quince Salarios Mínimos, Vitales y Móviles con puestos jerárquicos estén sujetos al impuesto. Sin embargo, en un gesto para aliviar de inmediato la carga tributaria, Massa ha anunciado que, antes de que el proceso legislativo culmine, en octubre se elevará el umbral de ingresos exentos hasta los 1.770.000 pesos, una medida que afectaría positivamente a un amplio espectro de contribuyentes.

Este ajuste en el impuesto a las ganancias fue inicialmente comunicado por el propio Ministro Massa la semana pasada, cuando manifestó su intención de liberar a todos los trabajadores de este tributo. No obstante, el proyecto detalla que solo se mantendrán bajo su alcance los puestos jerárquicos que superen quince salarios mínimos vitales y móviles, excluyendo a los empleados de cuarta categoría, es decir, a aquellos trabajadores en relación de dependencia y jubilados.

Una nutrida columna de camioneros encabezada por @pablomoyano_ok acompaña a @SergioMassa en su anuncio sobre la eliminación del pago de Ganancias para la mayoría de los trabajadores.

Video @cgt_camioneros pic.twitter.com/3AduRlb0Cl

— Agencia El Vigía ???????? (@AgenciaElVigia) September 11, 2023

Desde el Ministerio de Economía se enfatiza que esta reforma afectará a un universo relativamente pequeño de alrededor de 90 mil contribuyentes, lo que representa menos del 1% de los empleos actuales. En contraste, se estima que aproximadamente 800.000 contribuyentes dejarían de abonar este impuesto, según los cálculos del Palacio de Hacienda. Los sectores más beneficiados por esta medida incluirían a los trabajadores de la industria manufacturera, la administración pública, los prestadores de servicios y la intermediación financiera.

El proyecto contempla varios puntos clave adicionales. Establece un nuevo mínimo no imponible equivalente a 15 Salarios Mínimos Vitales y Móviles mensuales, con ajustes periódicos en enero y julio de cada año. Asimismo, se conserva el beneficio del 22% de zona desfavorable para aquellos contribuyentes ubicados en áreas geográficas con mayores desafíos económicos. Se busca eliminar las complejidades relacionadas con las deducciones personales y generales, simplificando así el proceso de declaración fiscal para los trabajadores. Además, se prevé una reducción de la carga operativa para los empleadores a través de un sistema simplificado, lo que contribuirá a disminuir los costos asociados al cumplimiento de las obligaciones tributarias

En última instancia, el Ministerio de Economía subraya que esta medida representa un esfuerzo significativo por parte del Estado, ya que dejará de recaudar cerca de 1 billón de pesos argentinos anuales. Este monto se traducirá directamente en un aumento del poder adquisitivo de los trabajadores y jubilados, impulsando así el consumo y fortaleciendo la economía del país.

En términos técnicos, se planea que, en caso de aprobarse el proyecto (a excepción del nuevo piso, que se establecerá por decreto), se implementará un régimen simplificado cedular denominado "Mayores ingresos" dentro del impuesto a las ganancias. Dado que el impuesto opera de manera anual, este tributo entraría en vigencia a partir de enero de 2024.