En medio de la cruzada del Gobierno porteño contra el lenguaje inclusivo, justificado en los supuestos malos resultados académicos de los alumnos, una reconocida escuela de Flores tuvo que volver a las clases virtuales porque desde el viernes están sin luz ni agua, y desde el establecimiento denuncian que ni desde Edesur ni el Gobierno porteño resuelven el problema.

"El problema principal fue durante el fin de semana. Vinieron los de Edesur, se fueron a la media hora. Decían que no lo podían solucionar. Teníamos que iniciar nuevos reclamos, y ayer hasta último momento teníamos esperanza. Decían que les faltaba material, que lo iban a buscar, pero nunca volvieron”, explicaron a AM750 el rector del Instituto Ana María Janer, Rodrigo Gómez, y la directora de la primaria, Mariela García.

En el instituto estudian más de 1.000 niños y trabajan más de 150 personas. Esto hizo que, ante la falta de respuestas tanto del Gobierno porteño como de la prestadora del servicio de luz, las autoridades decidieran a última hora volver al formato virtual, impuesto durante la pandemia y fuertemente criticado en su momento por la ministra de Educación porteña, Soledad Acuña. "Uno pretendía darles el lugar que les corresponde a los chicos y lamenta la situación de la familia”, señalaron los directivos en diálogo con el móvil de Emanuel Herrera en AM750.

De hecho, el reclamo del Gobierno porteño contra el Ejecutivo nacional por haber decretado la virtualidad de las clases llegó a la Corte Suprema, que terminó fallando a favor de la gestión de Horacio Rodríguez Larreta. Pero en el caso de la escuela de Flores, la virtualidad es obligada y no se debe a la situación sanitaria, sino a los problemas de infraestructura.

Es que la desinversión es uno de los puntos que más se le critican a la gestión de Soledad Acuña. Esto se ve en situaciones como el incendio de una sala de máquinas en una escuela de Boedo, el desplome de un techo en Parque Patricios o la habilitación de clases en instituciones que no tienen las obras finalizadas ni la conexión de gas en funcionamiento. También en el reclamo docente por la pérdida de poder adquisitivo.

El rector del Instituto Ana María Janer apuntó a que el problema se debe a un desperfecto en un medidor que dejó sin energía eléctrica el sector del edificio que alimenta las bombas de agua. Si bien varias cuadrillas de Edesur trabajaron en la institución, no lo solucionaron definitivamente.

"Dicen que es sencillo de resolver, una plaqueta que se quemó, pero cada vez que viene la cuadrilla siempre hay una dificultad para hacerlo. Ayer dijeron que tienen que hacer un corte en una subestación y no tienen luz subterránea para hacerlo", relató Gómez sobre lo ocurrido. Consultados por AM750, desde el Ministerio de Educación porteño no aportaron información al respecto.