El matutino montó una operación contra Viviana Fein con una supuesta testigo clave que denunció irregularidades en el procedimiento en el departamento del extitular de la UFI AMIA. Ricardo Saenz, fiscal general y uno de los impulsores de la marcha del miércoles, busca llevar la causa al fuero Federal donde militan sus empleados: Stornelli, Pollicita, Pleé y compañía.
Redacción En Orsai // Martes 17 de febrero de 2015 | 11:40
De blando no tiene nada. El golpe que orquesta la mafia judicial junto sectores de la oposición y los medios de comunicación sumó un nuevo capítulo; el desplazamiento de la fiscal del caso Nisman.
Con el matutino como punta de lanza, los dardos se dirigen contra Fein por supuestas irregularidades denunciadas por una testigo clave que presenció el procedimiento en el departamento de Alberto Nisman apenas horas después de su muerte. Entre las "denuncias" de quien fue identificada como Natalia Fernández se destacan la supuesta presencia de cinco casquillos de bala, policías que usaban la máquina de café de Nisman y oficiales de prefectura que manipulaban pruebas sin ningún tipo de cuidado.
Sin embargo, la más extraña de todas las denuncias es la que indica que en un edificio lindero se encontraron rastros de un francotirador: "También me da miedo decir que en el edificio de enfrente encontraron un casquillo de un francotirador de un arma que no hay en Argentina", publicó Clarín con dudas, ya que de confiar en su fuente hubiera llevado este dato al título tapa.
El objetivo es desplazar a la Fiscal Fein para llevar la causa al fuero Federal donde Saenz podría poner a trabajar a alguno de sus "empleados" al frente de una causa en la que todas las pericias hasta hoy parecen indicar que se trató de un suicido.
La propia Fein desmintió a la testigo que "plantó" Clarín: "Lo que dice esta chica no existe, es descabellado y se va a tener que hacer cargo de lo que dijo". Por su parte, Saenz se lavó las manos y buscó dejar en una posición incómoda a la Fiscal para luego poder desplazarla: "Nunca leí la causa, siempre me manejé con lo que la doctora Fein me iba diciendo. Nada de todo esto me contó, pero no se puede descartar".
Sin embargo, se sospecha que el propio Saenz, quien tiene acceso a la causa aunque asegura no haberla leído, es el encargado de las filtraciones a Clarín.
El golpismo busca ganar tiempo y evitar que la muerte de Nisman, como todo indica hasta ahora, quede caratulada como suicidio. El objetivo es desplazar a Fein para luego hacerse del control total de la causa en el fuero Federal y manipularla a su antojo. Van por todo, van por Cristina.