Comités de agitación y propaganda para encender la militancia y el diálogo con el pueblo

Unas mil 600 personas de 36 nacionalidades se reunieron en la escuela de formación del MST Florestan Fernandes, en Guararema, Sao Paulo, donde el viernes se produjo una brutal intervención de la policía que, sin orden judicial y disparando armas letales, irrumpió por la fuerza en las instalaciones del centro.

En sus palabras, Lula rememoró que cuando estaba en el velorio de Florestan recibió la noticia de la masacre de Villa Columbiária, cuando 11 manifestantes del MST resultaron asesinados en Rondonia, y dijo creer que ya pasó la hora de tener que viajar por Brasil haciendo actos solidarios con las víctimas de esas desgracias.

La secretaria nacional de políticas sociales y derechos humanos de la Central Única de los Trabajadores (CUT), Jandyra Uehara, coincidió en la necesidad de la unidad y la construcción colectiva y enfatizó la importancia del acto convocado para el próximo día 10 en Sao Paulo.

En esa fecha movimientos sociales, sindicatos y partidos políticos lanzarán la campaña 'Por un Brasil justo para todos y para Lula', cuyo propósito será defender la democracia, el Estado de derecho y al fundador del PT y expresidente Luiz Inácio Lula da Silva.

'Tenemos que tener una agenda lucha; que sea un noviembre rojo. Nosotros estamos vivos y resistiremos', exhortó Uehara, citada por el periódico Brasil de Fato en su versión digital.

El movimiento apunta a la "contrainformación" frente a los procesamientos judiciales que existen contra Lula, quien si es condenado en dos instancias estará legalmente fuera de cualquier intento de ser candidato en 2018. "Hemos decidido salir de la parálisis de la izquierda en general y en lugar de gastar tiempo en discusiones internas queremos recuperar el diálogo con la sociedad y defender a Lula de los ataques que ha sufrido", dijo el ex secretario general de la presidencia Gilberto Carvalho, articulador del diálogo con los movimientos sociales y religiosos.

El movimiento que será lanzado en San Pablo el próximo jueves se llama "Por un Brasil Justo para Todos y Para Lula", y oficialmente no es el lanzamiento de Lula para las presidenciales de 2018.

El argumento, según Carvalho, es montar en todo el país "comités de agitación y propaganda para encender la militancia y el diálogo con el pueblo". Carvalho, quien fue secretario de la presidencia de Lula y de la sucesora de éste, Dilma Rousseff, dijo que el movimiento "no es el lanzamiento de la campaña presidencial sino que es una campaña más amplia que esto".