A poco de llegar a la presidencia en 2015, el Presidente Macri benefició a una empresa de la familia Macri para realizar la obra del soterramiento del tren que une la zona oeste con la Capital Federal.

A través de la constructora IECSA, los Macri realizaron un enorme negociado para llevar adelante el proyecto. Con un DNU, el mandatario desembolsó unos 40 mil millones de pesos para financiar la obra.

Ahora desde el Ejecutivo aseguran que se está "trabajando y avanzando en la rescisión de los contratos para las obras del soterramiento porque de la forma en que está planteado es inviable". Así lo publica hoy el diario Página 12.

Debido a la crisis que explotó por el modelo económico de ajuste, la obra quedó paralizada a fines de 2018 y desde entonces nada se realizó. Pese a la millonaria suma que Macri giró para la su empresa familiar.

El titular de la cartera de Transporte, Mariano Meoni, explicó que "tenemos tres etapas de discusión: una de carácter técnico sobre cómo se resuelve y se continúa la obra; una segunda de carácter jurídico, acerca de si es posible esa rescisión sin impacto negativo para el Estado, y una tercera de índole económico, para ver si lo que se reclama y se demanda es justo o no".

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— En Orsai (@EnOrsai) January 12, 2020