Los contratos deberían ser a través de un régimen diferente

Para la OEA Argentina no pasa por un buen momento en la lucha contra la corrupción. A partir de la llegada de los empresarios al Gobierno, los escándalos por los conflictos de intereses se volvieron moneda corriente. Mientras que el organismo a cargo de Laura Alonso apañó la protección de esos temas.

En un informe de 37 páginas, se recomendó que el Estado tiene que darle mucha más transparencia a la contratación de los funcionarios públicos. También fue moneda corriente con el arribo del macrismo al poder que los familiares de diferentes funcionarios fueron nombrados, y hasta en algunos casos de forma retroactiva.

Otro de los puntos que subrayaron desde la entidad internacional fue lo vinculado a los contratos que el propio Estado mantiene con diferentes empresas privadas. "Contratos cuyo objeto sea la prestación de servicios profesionales a título personal, para contratar personas que por sus características y por la naturaleza de las funciones a desarrollar deberían ser contratadas a través de un régimen diferente", sostuvieron.

Es que la irregularidad fue tan evidente sobre cómo se enriquecieron las empresas de las que los funcionarios mantienen vínculos que fue inocultable para los enviados por la OEA.

Todos estos temas deberían ser estudiados y normados también por la Oficina Anticorrupción a cargo de Laura Alonso. Pero lejos de tener una postura de transparencia, la funcionaria ultra macrista se inclinó a proteger a los funcionarios designados por Mauricio Macri.