(El Gobierno quiere) terminar su mandato sin mover un pelo por la inseguridad"

A través de un escueto comunicado de prensa, el Colorado propuso que "las Fuerzas Armadas entren en la lucha contra el narcotráfico". Una propuesta que adelantó uno de los pocos acólitos que todavía le responden a Francisco de Narváez: el hermano del gobernador bonaerense, José "Pepe" Scioli.

Aunque De Narváez salió tímidamente a sondear cómo cae su propuesta en la sociedad y que luego recabaría a través de unas de sus habituales encuestas de "opinión pública" que suele encargar.

El comunicado del Colorado, le apunta al Gobierno y lo acusa de querer "terminar su mandato sin mover un pelo por la inseguridad".

Una conclusión, a la que De Narváez acude para difundir que le pidió al jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, si "el Gobierno iba a convocar al comité de crisis" para coordinar la seguridad nacional, en una de las escasas veces que habló en el recinto de la Cámara baja en su más de ocho años como diputado (le quedan cuatro más por delante), tras lo cual se retiró por "problemas personales".

Sobre el final del mismo, De Narváez solo agrega que "las Fuerzas Armadas entren en la lucha contra el narcotráfico".  Un tema sobre el que Pepe Scioli ya había el primer ensayo. "Todas las fuerzas de seguridad del paÝs deben abocarse coordinadamente a la pelea contra el delito y hay que incorporar a las Fuerzas Armadas a la lucha contra el narcotrafico", marcó el hermano del gobernador en un comunicado que firmó como presidente del casi desconocido Movimiento Desarrollo Argentino.

Allí también definió que "es imprescindible correr las banderas ideológicas y políticas para intentar resolver entre todos el drama de la inseguridad, que se lleva la vida de argentinos".

Los abanderados de darle rienda libre a la policía para que actúe contra el delito y el narcotráfico, al que muchas veces están asociados (como demuestra el encarcelamiento de altos jefes policiales en Santa Fe y Córdoba), ahora también quieren a las Fuerzas Armadas en la calle.