EXTORSIÓN

Denuncian a Stornelli por coimas para liberar a empresarios de la causa de las fotocopias de los cuadernos

Un director regional de la DEA y sobrino del Escribano de Macri pidió 500.000 dólares a un empresario para no detenerlo y dijo que era una práctica habitual del fiscal Stornelli, con quien colabora. En exclusiva, la filmación del primer pago, las fotos con Stornelli, las filmaciones en la fiscalía, los audios y mensajes grabados. Dos custodios de Stornelli debían acompañar al operador para el cobro en una financiera, pero un allanamiento previo a su domicilio los puso sobre alerta y no acudieron a la cita. Una incursión en el tenebroso submundo de la mafia. El dinero que le sacaron a Paolo Rocca y Eurnekian.

Denuncian a Stornelli por coimas para liberar a empresarios de la causa de las fotocopias de los cuadernos

POR HORACIO VERBITSKY // Viernes 08 de febrero de 2019 | 08:37

Invocando amistad con el fiscal Carlos Stornelli, Marcelo D’Alessio le pidió 500.000 dólares al productor agropecuario Pedro Etchebest, a cambio de que no se investigara su presunta participación en delitos mencionada por el arrepentido ex presidente de la ONCA, Juan Manuel Campillo, quien sindicó a Etchebest como recaudador “entre propietarios de campos de orientación ganadera a cambio de beneficios” de la ex Oficina Nacional de Control Comercial Agropecuario. Terminaron cerrando por 300.000 y D’Alessio debía cobrarlos el jueves 7, acompañado por dos policías de la custodia de Stornelli. Si se toma al pie de la letra lo que D’Alessio afirma, la DEA estadounidense actúa activamente en la causa de los encuadernados y prepara a los testigos para que declaren o para que compren su libertad enriqueciendo a los funcionarios judiciales y al servicial intermediario. Un allanamiento realizado el miércoles al domicilio de D’Alessio lo puso sobre alerta y no concurrió. Pero un adelanto de 15.000 dólares quedó documentado con audios, filmaciones, fotografías y numeración de los billetes. La diputada cívica libertadora Elisa Carrió dijo en un tuit la noche del jueves que se trata de una operación del juez federal de Dolores, Alejo Ramos Padilla, “que es de La Cámpora para ensuciar a Stornelli”. Es obvio que ignora la cantidad y calidad de la prueba acumulada contra su amigo.

D’Alessio persuadió a Etchebest cuando le contó que según Campillo los dividendos de la actividad eran enviados por el productor desde Uruguay a su hijo Matías, que es ciudadano estadounidense. Según Campillo, los frutos de la actividad ilícita terminaban en la empresa South Star International LLC, del condado de Saint Lucie, en Florida, Estados Unidos. Para demostrar la seriedad de su gestión, D’Alessio le mostró el documento oficial por entonces secreto en el que Campillo lo involucra.

No era el primer conflicto que Etchebest tenía con la justicia. Antes había sido procesado por el juez federal de Mar del Plata Santiago Inchausti por reducción a la servidumbre de trabajadores rurales que desempeñaban tareas en sus campos de Sierra de los Padres. Pero otra cosa es un proceso federal, en Comodoro Py, en la causa de los capitostes patronales y políticos encuadernados por Stornelli y el Doctor Glock, con el acompañamiento entusiasta del duopolio Clarín-La Nación.

Además de amigo de Stornelli, Marcelito D’Alessio es sobrino de Carlos Marcelo D’Alessio, el escribano general de gobierno. Ante una pregunta de Etchebest sobre el inicio de la causa, dice que la digitalización de los cuadernos que el ex policía Jorge Bacigalupo le entregó al diario La Nación fue realizada por un escribano que designó su tío:

En uno de los diálogos grabados, afirma que su gestión será gratis, pero que es imprescindible “una atención con Carlos”. La alternativa es el allanamiento y la detención, lo presiona. Según D’Alessio al fiscal le urge el dinero porque está en gestiones para comprar la casa en Pinamar de Héctor Colella, el amigo a quien Alfredo Yabrán dejó sus bienes.

Esta historia introduce de lleno en el submundo mafioso donde actúan operadores judiciales y periodísticos, agentes de inteligencia y funcionarios del gobierno, todos bajo la mirada atenta de la embajada de Estados Unidos y de sus organismos de seguridad nacional. D’Alessio nació en la Argentina pero es ciudadano estadounidense, y se atribuye haber conducido los ocho procedimientos en los que se incautó mayor cantidad de cocaína en el país.

Todo terreno

Con constantes elogios a la inteligencia y el poder de su amigo y a la confianza que le inspira, Etchebest estimula su manifiesta logorrea para que relate sus proezas. Ambos se conocieron en 2013 en ENARSA. D’Alessio dice haber sido infiltrado allí por la National Security Agency de Estados Unidos, para informar de las transferencias de dinero desde el Banco Macro hacia Panamá para Antonini Wilson, y dinero que se lavaba en Estados Unidos, pero que desde hace un año y medio se desempeña en el Ministerio de Seguridad de la Nación.

Entre el personal de planta del ministerio no figura, pero eso no es decisivo. Ante el playero de un estacionamiento que lo apura se presenta como director de la DEA estadounidense, con 6.000 personas a su cargo, y durante el trámite de la extorsión le envía a Etchebest fotos y documentación de procedimientos de drogas en distintos puntos del país. Desde que gobierna Cambiemos, D’Alessio ha defendido las posiciones del gobierno sobre seguridad y defensa en los programas de televisión más serviciales. Al presentarlo en un show de animales, el relator de fútbol que lo conduce dijo que no quería hablar de más al explicar para quién trabajaba su interlocutor. Fue D’Alessio quien mencionó organismos internacionales.

—¿Trabajás para organismos internacionales?

—Si.

—¿No podés contar para cuál?

—No.

—Es un experto, que combate el narcotráfico en el campo, no sentadito en un escritorio—, resumió el relator.

—Investiga— lo corrigió el panelista Daniel Santoro, quien ratificó la importancia del experto.

—Investiga, pero no con una lupa. Es un tipo valiente— insistió el relator.

También Crónica TV lo presentó como el mayor experto en el país sobre narcotráfico.

Su autobiografía, escrita para la revista Def, fue amplificada por el portal de Daniel Hadad. (https://www.infobae.com/def/defensa-y-seguridad/2018/07/19/marcelo-dalessio-hace-falta-un-master-plan-contra-el-narco/). También es columnista del matutino Clarín, que lo presenta como experto en narcotráfico.

Ninguno de esos medios confiere tal reconocimiento a alguien que no llegue con el visto bueno de la embajada.

Se atribuye haber trabajado codo a codo con Stornelli y el juez Claudio Bonadío, en una suite del hotel Four Seasons “alquilada por Bonadío a nombre de un Mister Nadie, para lograr la detención de Julio De Vido y Roberto Baratta”, y haber sido el informante de Daniel Santoro sobre la causa de los encuadernados. “Nuestro libro”, dice en relación a El Mecanismo, que firmó Santoro.

Sus relaciones con Stornelli, con Santoro y con Patricia Bullrich están debidamente confirmadas. Además es uno de los abogados defensores del valijero cantor Leonardo Fariña, junto con su socio Rodrigo González, tarea por la que se jacta de que la Ministra de Seguridad los remunera con 200.000 pesos mensuales.

Afirma que personal de la inteligencia gubernativa alimentó durante años a Fariña con informaciones que servían para procesar a otras personas, como Ricardo Etchegaray, o para extorsionar a los mencionados, en nombre de Fariña. D’Alessio cuenta que él le puso fin a esa situación, cuando le preguntó a Fariña si quería seguir ganando plata de ese modo o salir en libertad. Lo consiguió en dos meses, lo cual motivó el reclamo de Bullrich.

—¿Cuánto más le querés sacar, Patricia?

—Está bien. Pero me entregás a Lázaro Báez y la plata.

Fariña es el autor de la boutade del siglo: que los Kirchner se robaron un Producto Bruto. Según el FMI, para abril de 2018 el PIB de la Argentina era de 627.000 millones de dólares. Las inversiones realizadas por el ex secretario de Néstor Kirchner, del que Cristina prescindió, Daniel Muñóz, rondan los 70 millones de dólares, es decir apenas el 0,01% de un PIB. La desesperación del juez, el fiscal y el gobierno es que hasta ahora no han hallado una sola prueba de que ese dinero pertenezca a Cristina.

Etchebest recibió el reenvío de un saludo de año nuevo de Patricia Bullrich a D’Alessio y le contó que le había pedido que fuera en lugar de ella a un programa de televisión a defender la incorporación de las pistolas eléctricas Taser.

Etchebest quiso saber si Bullrich lo hizo entrar al Ministerio.

—No, el que me hizo entrar fue Mario Montoto.

Según su descripción, el presidente de la Cámara de Comercio Argentino Israelí, especialista en parafernalia bélica, de seguridad e Inteligencia, es una de las tres o cuatro personas más poderosas del país y opera en las sombras, desde sus tiempos en Montoneros. “Es el dueño de todas las cámaras de seguridad que hay en la Argentina, socio de Hadad y tiene el 50% de Infobae“. Por una diferencia de negocios con Montoto, “a su pedido lo metimos a Sergio Taselli en el asunto de los cuadernos, no tenía un porongo que ver. Pero pasó dos meses en cana. (Risas)“.

Acá toda la investigación completa.

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