Cuando el PRO se disponía a concentrar esfuerzos en la campaña bonaerense, donde Vidal se encuentra rezagada, el balotaje porteño frustró sus planes. Macri se ve obligado a apuntalar a Rodríguez Larreta y la tropa PRO retrasó su excursión al conurbano.
Andrés Brown Redacción En Orsai // Viernes 10 de julio de 2015 | 14:03
La presión PRO y de los medios opositores, en particular la del Grupo Clarín, no tuvo éxito y Horacio Rodríguez Larreta deberá enfrentar una segunda vuelta.
Mauricio Macri debió suspender su campaña por el interior del país, tras la confirmación de que Martín Lousteau competirá en el balotaje, y ahora se ve forzado a seguir haciendo campaña para asegurar el triunfo de Rodríguez Larreta en la Ciudad.
Si el balotaje ya significa un desgaste, una posible derrota sería un golpe casi mortal para sus propias ambiciones presidenciales. La derrota en Santa Fe de Miguel del Sel ya significó un duro revés para el despligue nacional del PRO, un partido que sigue encerrado en la Capital.
El macrismo apuntaba a ganar la elección porteña en primera vuelta, sobre todo porque el plan era enviar inmediatamente a todo el personal que había trabajado en la candidatura de Rodríguez Larreta al conurbano bonaerense, para apuntalar la precandidatura de María Eugenia Vidal.
Así, con el balotaje confirmado, la estructura que sostuvo al PRO en la Ciudad tendrá que quedarse en esas tierras por diez días más y demorar su desembarco masivo en Provincia, el lugar más flojo del macrismo.
De hecho, una reciente encuesta de la consultora Rouvier & Asociados indica que Daniel Scioli le saca 27 puntos a Macri en La Matanza.
En lo que respecta a las proyecciones electorales para la gobernación bonaerense, el estudio pone a la cabeza a la fórmula de Julián Domínguez – Fernando Espinoza con un 26,7%, seguido de cerca por la fórmula de la misma fuerza de Fernández y Sabbatella con 21,7% y, tras ellos, posiciona a la dupla de Cambiemos con Vidal – Salvador en 17,7%.
El ex gobernador bonaerense, Felipe Solá, y Daniel Arroyo, candidatos por el Frente Renovador quedan en un cuarto lugar con 10,3% de intención de voto.