El PRO de Macri termina siendo un partido político de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, sin proyección en ningún otro lugar

Con un triunfo holgado, que sin embargo deberá enfrentar un balotage de final abierto, el PRO se consolidó de la mano de Horacio Rodríguez Larreta como un partido al que le cuesta exceder los límites de la Capital.

Sobre las elecciones de ayer, el jefe de gabinete Aníbal Fernández destacó que "el PRO de Macri termina siendo un partido político de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, sin proyección en ningún otro lugar y pareciera que nosotros no tenemos derecho a estar contentos también, donde hubo un compañero que ganó la elección".

Al hacer un balance sobre las elecciones en las distintas provincias, Fernández señaló además que "hoy veía llamativamente los diarios de la mañana el esfuerzo denodado que hacen algunos medios por mostrar que el oficialismo ha perdido y la verdad es que uno tiene que ir mirando, y mirando y analizando pacientemente qué es lo que ha sucedido en cada uno de los distritos del país".

Al trazar un balance pormenorizado de los resultados en cada una de las provincias del fin de semana, Fernández destacó que "en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires las decisiones son las que son y los resultados son los que son y los resultados están a la vista. En 15 días tendremos una nueva elección para saber cuál de los dos (Larreta o Lousteau) será el nuevo jefe de Gobierno".

"En Córdoba ganó (Juan) Schiaretti, los resultados anoche estaban a casi 5 puntos de diferencia, no creo que hayan variado mucho esos datos", opinó.

Asimismo, destacó que en el Frente para la Victoria-PJ "en La Rioja se ganó cómodamente, con Sergio Casas, con casi 15 puntos de diferencia".

En tanto, "en Córdoba, que fueron todos, absolutamente todos, a competir contra Schiaretti y contra nuestro candidato (Eduardo) Acastello, bueno... Les ha sido muy adverso el resultado como lo acabamos de mencionar. En La Rioja pasó exactamente lo mismo, fueron todos, absolutamente todos con 42 colectoras de la oposición, fueron todos a hacer campaña contra el gobierno provincial y el Frente para la Victoria (FPV) ganó por 15 puntos".

Consultado sobre la decisión que debería tomar el FPV de la Capital Federal frente al balotaje, dijo: "esa es una decisión que deberá tomar nuestro candidato en los próximos días. El mismo hizo referencia a la necesidad de ser cuidadosos con los votos y no hay ningún apuro para salir anoche mismo, ni desesperados, hay que dejarlo al mismo que él tome la decisión y lo analice con los compañeros de la Ciudad Autónoma".

Sobre si los resultados provinciales que se vienen dando -en donde en muchos distritos ha ganado la oposición política al kirchenrismo- el jefe de Gabinete vaticinó: "Yo no tengo dudas de que en octubre volveremos a ganar a nivel nacional. Las elecciones nos muestran una propuesta cada vez más sólida del peronismo kirchnerista y del Gobierno nacional. Y, además, tengan en cuenta que la competencia a nivel nacional siempre tiene otras características y en cada uno de esos distritos, Santa Fe, Córdoba, Ciudad de Buenos Aires, la ascendencia respecto de la propuesta del Gobierno va a ser muy fuerte y eso nos va a permitir ganar las elecciones nacionales. No tengo dudas de esto".

Así, después de haber sufrido un duro revés en Santa Fe, perdido en Córdoba y La Rioja, el PRO jugará todas sus fichas a imponerse en el balotage porteño ante Martín Lousteau.

Mauricio Macri, por su parte, apunta a que las derrotas de su partido no afecten sus chances presidenciales. Un hipotético triunfo de Lousteau en la segunda vuelta ante Rodríguez Larreta, sin embargo, sería un golpe casi mortal para el líder del PRO.