Tras el golpe santafesino y con pocas chances en Córdoba, Macri abre el paraguas

PRONOSTICA BALLOTAGE PORTEÑO

Tras el golpe santafesino y con pocas chances en Córdoba, Macri abre el paraguas

Después de haber sufrido un duro revés en Santa Fe, y con pocas chances en las electorales en Córdoba, Macri consideró inevitable una segunda vuelta en la Capital, donde su delfín Rodríguez Larreta va por la sucesión. El alcalde busca blindar su candidatura presidencial.

Andrés Brown Redacción En Orsai // Martes 30 de junio de 2015 | 16:36

Es muy difícil ganar en primera vuelta,

"Es muy difícil ganar en primera vuelta, nunca sucedió", sentenció Mauricio Macri durante una recorrida junto a Horacio Rodríguez Larreta y Diego Santilli, la fórmula del PRO que competirá el próximo domingo por la sucesión del jefe de Gobierno porteño.

Tras señalar que la segunda vuelta en la Ciudad será inevitable, Macri hizo un llamado a sus votantes, pensando en lo que serán las presidenciales. "Les digo a los vecinos que todo suma, los votos que reciba Horacio después tendrán que ver con la campaña nacional, de la que soy precandidato a presidente", agregó al respecto. El líder del PRO dijo estar "muy contento con la relación creada con Sanz, Carrió y el radicalismo" y reiteró que ese espacio conjunto es la opción de cambio frente al kirchnerismo.

Por otro lado, Macri volvió a referirse a la remoción del juez Luis María Cabral de la Sala I de Casación. Consideró que esa maniobra impulsada por el kirchnerismo en el Consejo de la Magistratura constituyó "un disparate y un atropello".

"Me parece muy mal por parte del Gobierno, un disparate, un atropello, no está respaldado con la ley lo que hicieron con Cabral", opinó sobre lo ocurrido con el magistrado, que formaba parte de una sala que tenía causas sensibles para el Gobierno, como la del memorándum con Irán. "El que gobierna no debe creerse el dueño del Estado, es un servidor público que tiene que devolver la confianza de la gente, no rajar jueces", agregó.

Finalmente, Macri fue consultado sobre la marcha convocada para el 7 de julio por sectores de la justicia y la política para reclamar contra lo ocurrido con Cabral y para pedir que se respete la independencia del Poder Judicial.

"Estoy de acuerdo con la marcha, cada vez que la ciudadanía se moviliza lo apoyo. Reconocernos el uno al otro. El patoterismo no va a construir una argentina mejor", dijo sobre la convocatoria, aunque no confirmó su presencia en la misma. "No se si voy a ir", concluyó.

El jefe de gobierno porteño empezó a abrir el paraguas para que, en caso de que Horacio Rodríguez Larreta entre al ballotage y no gane en primera vuelta, ese desenlace no sea leído como un golpe a su candidatura presidencial.

"Es muy difícil ganar en primera vuelta, nunca sucedió", sentenció Mauricio Macri durante una recorrida junto a Horacio Rodríguez Larreta y Diego Santilli, la fórmula del PRO que competirá el próximo domingo por la sucesión.

Tras señalar que la segunda vuelta en la Ciudad será inevitable, Macri hizo un llamado a sus votantes, pensando en lo que serán las presidenciales.

"Les digo a los vecinos que todo suma, los votos que reciba Horacio después tendrán que ver con la campaña nacional, de la que soy precandidato a presidente", agregó al respecto.

El líder del PRO dijo estar "muy contento con la relación creada con Sanz, Carrió y el radicalismo" y reiteró que ese espacio conjunto es la opción de cambio frente al kirchnerismo.

Así, el alcalde busca polarizar al máximo con el gobierno, y blindar su propia candidatura de otras derrotas PRO en distritos importantes.

Tras el duro golpe de Miguel del Sel en Santa Fe, la caída de la fórmula macrista en Tierra del Fuego y las pocas perspectivas para los comicios del domingo próximo en Córdoba, Macri quiere despegarse de esa suerte de onda negativa.

Así, el macrismo parece haber vuelto a sus inicios, cuando el principal problema que tenía la fuerza de Macri era no poder exceder a la Capital Federal.

Por eso, el alcalde intenta anticiparse e instalar la lectura de que un ballotage no significaría un desaire para su fuerza.

Sin embargo, si Horacio Rodríguez Larreta no ganara en primera vuelta, y debiera ir a una segunda con Martín Lousteau o Mariano Recalde, eso implicaría un desgaste lógico para la imagen del PRO.

En Córdoba, por su parte, la dupla Oscar Aguad-Héctor Baldassi no logra subir en las encuestas, y hasta se difundieron varias internas entre los candidatos y el jefe de campaña Luis Juez.

En esa provincia, donde no se realizan PASO, se definirá este domingo el sucesor de José Manuel de la Sota y 70 bancas de la Legislatura provincial.

Y los principales candidatos son: el intendente de Villa María, Eduardo Accastello, en fórmula con el humorista Cacho Buenaventura por el kirchnerismo; y el oficialista Juan Schiaretti que lleva a Martín Llaryora como compañero de fórmula por Unión Por Córdoba. Aguad aparece bastante relegado, según los sondeos previos. Un resultado adverso en Córdoba sería otro duro golpe para las aspiraciones de Macri.

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