
Con la terrible muerte del fiscal Nisman, no estamos asistiendo a una simple operación de prensa que intenta evitar el conocimiento de la verdad de los hechos y responsabilizar al gobierno. Estamos frente a un intento de Golpe de Estado, que procura sacar del medio a la Presidenta y terminar con este proyecto político que gobierna desde el 2003, para imponer la restauración conservadora-neoliberal que gobernó durante décadas para su provecho.
Gustavo López - Subsecretario General de la Presidencia y docente en la UBA // Martes 10 de febrero de 2015 | 18:12
Nada es casualidad, la operación estaba preparada desde hacía tiempo, pero adelantaron su ejecución. La denuncia de Nisman es indefendible. Su pobreza jurídica y su acusación parecen producto de una alucinación, pero son parte de un complot.
A lo largo de estos años nos hemos enfrentados al poder real. No sólo a los que históricamente se han creído los dueños de
Cuando Néstor Kirchner decidió trabajar junto a Lula y a Chávez en un proceso de autonomía regional respecto de del poder financiero internacional diciéndole “No al Alca”, luego de conseguir una quita fabulosa de la deuda, congelar las tarifas y generar un proceso de recuperación económica basado en la expansión del consumo y la reindustrialización, a algunos les molestó.
Cuando Cristina Fernández de Kirchner terminó con el vergonzoso robo que se perpetraba a través de las AFJP, recuperó el manejo de los fondos de jubilaciones y pensiones y le quitó al capital parasitario la ganancia exorbitante de miles de millones de pesos por no hacer nada, a algunos les molestó.
Cuando a fines de 2009 conseguimos después de 26 años de lucha, modificar la ley de medios de la dictadura para democratizar el acceso a la palabra, a algunos les molestó, como les molestó la recuperación de YPF y la soberanía energética.
Cuando definimos “Patria o Buitres” y nos plantamos frente a los que querían ver nuevamente a nuestro país de rodillas, endeudado por generaciones y decidimos no pagar usura, a algunos les molestó.
La lista de luchas en favor del pueblo y de la recuperación de la democracia real es muy larga y de los que se sintieron molestos también, pero finalmente cuando nuestra Presidenta decidió jugarse entera para intentar que una de las deudas pendientes de nuestra democracia, la causa Amia, no quedara impune y luego de reclamar durante años en
Y creo que lo que molestó fue la posibilidad de que se tomen realmente esas indagatorias. Que
Hoy estamos discutiendo con el poder real y no con los partidos de la oposición. Y es que la mayoría de esos partidos dejaron su representación de lado y se subordinaron a la agenda de los grupos concentrados de poder. Nos gustaría estar debatiendo modelos y políticas de Estado, pero no quieren y lo que hoy se puso en juego es el futuro de la democracia.
Cuando desde el gobierno se planteó la dicotomía Democracia-Corporaciones, lo que estábamos señalando era que los golpes de Estado en Argentina ya no tienen a los militares como ejército de ocupación al servicio de las oligarquías. Desde el 89 en adelante, son las desestabilizaciones económicas, las corridas bancarias y cambiarias, la retención de divisas y los grandes grupos de medios como representantes de la concentración de capital quienes desestabilizan a los gobiernos democráticos para condicionarlos y gobernar por ellos.
Frente a la imposibilidad de golpes tradicionales, lo que algunos llaman “Golpe Blando” no es ni más ni menos que el sometimiento de la voluntad popular a los intereses concentrados. ¡Qué jueguen a las elecciones, qué voten, total gobernamos nosotros! Así pasó durante casi 15 años, entre el 89 y el 2003, después que las corporaciones le torcieron el brazo a Alfonsín, lo corrieron con un golpe de mercado y gobernaron a través de subordinados los siguientes años.
Ahora vinieron a cobrar. No soportan que el Frente para
Los intereses son económicos, las corporaciones son empresariales, judiciales, periodísticas y ahora, de los servicios.
La débil denuncia de Nisman, que no pasaba un examen de primer año de la facultad, no alcanzaba para mantener el escándalo. La política es mantener el escándalo, por eso la muerte.
Todo lo demás, es más de lo mismo. Un grupo de jueces y fiscales marchando para reclamar justicia, cuando son ellos los que deberían impartirla. Hacen política contra el gobierno pero la encubren con supuestos reclamos institucionales convocando “sin banderías políticas ni partidarias” a una marcha política opositora. ¿Por qué no marchan a cara descubierta contra el gobierno que no quieren? Eso es honestidad política. O una Diputada denunciando a diestra y siniestra con el único objetivo de desestabilizar sin que nadie la interpele por las locuras apocalípticas que nunca se cumplen y que se olvidan con la nueva denuncia.
Quieren desprestigiar a
Cuando desde la primera magistratura del país se planteaba que no compremos conflictos externos, se hablaba de esto y de la geopolítica de algunas potencias, más preocupadas por sus intereses económicos y construir enemigos para después someterlos, que por averiguar quien voló
Lo que ahora se juega es la defensa de
Escribo esta nota como Presidente de Concertación Forja, uno de los partidos o de las mil flores que trabaja acompañando a
En 1983 alcanzaba con recitar el Preámbulo de