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El ex duhaldista Ritondo se anotó como “heredero” de Macri

La iconografía macrista le sienta bien a Cristian Ritondo. En el Salón Blanco del Golden Center de Parque Norte, con globos amarillos, sushi y música de Gustavo Ceratti (La Ciudad de la Furia), el titular de la Legislatura porteña lanzó su precandidatura a Jefe de Gobierno con la pretensión de querer “ser el heredero de Macri”.

El ex duhaldista Ritondo se anotó como “heredero” de Macri

Por Ángel Lisboa // Martes 30 de septiembre de 2014 | 11:00

Bajo la tutela de su mentor, el menemista y ex jefe de la Side duhalista Miguel Angel Toma, Ritondo tuvo su propia fiesta de lanzamiento de campaña a la que asistió casi toda la plana mayor del macrismo –salvo Mauricio Macri y Gabriela Michetti, que le expresaron su cariño a la distancia— y sus delfines políticos como el ex arquero paraguayo José Luis Chilavert y un peluquero que aspira a romper con la hegemonía del sabbatellismo en Morón.

 

Solo le faltaron a la fiestita sus flamantes socios en la conducción del Club Atlético Independiente: el camionero Hugo Moyano y el técnico aeronáutico moyanista Ricardo Cirielli.

 

“Quiero ser el heredero de Mauricio Macri”, exclamó Ritondo desde el escenario, al que subió junto a su esposa como en un multitudinario y festivo aniversario de casamiento, con video incluido. Claro que con la lógica tradicional del peronismo ortodoxo aplicada al macrismo: “El que gana conducirá, el resto acompañará, pero el PRO seguirá siendo Gobierno en la Ciudad de Buenos Aires”, sentenció el ex dirigente duhaldista porteño.

 

La declamación de fidelidad macrista tenía sus destinatarios: el jefe de Gabinete porteño, Horacio Rodríguez Larreta, unos de sus adversarios en la competencia por la alcaidía de la Ciudad, y sentado en primera fila. La otra era Michetti (de campaña por el interior) pero que envió sus propios emisarios al festín. También María Eugenia Vidal, la vicejefa de Gobierno a quien Ritondo reemplazó en su responsabilidades legislativas, dado que Vidal reparte su tiempo entre su candidatura a la gobernación bonaerense y en suplantar los largos periodos de vacaciones de Macri.

 

También tuvieron un lugar destacado en el lanzamiento de Ritondo, el senador nacional Diego Santilli, la saltimbanqui diputada nacional Patricia Bullrich y parte de gabinete porteño: el ministro de Seguridad, Guillermo Montenegro; el secretario general de Gobierno, Marcos Peña; el ministro de Economía, Néstor Grindetti. El ex jefe de los servicios de inteligencia duhaldista, Toma, en cambio, fue casi un anfitrión: el ex funcionario menemista es uno de los encargados de forjar la “pata peronista” de PRO y su “hallazgo” es Ritondo.

 

Lastima que Ritondo no pudo contar con sus nuevos socios políticos en el CAI. El presidente de la Legislatura es un hombre del barrio porteño de Mataderos y reconocido hincha de Nueva Chicago –a cuyos barrabravas contrató como empleados públicos mientras estuvo al frente del Registro Nacional de las Personas durante la gestión de Eduardo Duhalde--, decidió cruzar el Riachuelo para mostrar su amor deportivo por Independiente, donde acompaña la presidencia de Hugo Moyano como vocal primero, junto al también camionero Pablo Moyano (hijo de Hugo) y a Cirielli, el sindicalista de los pilotos aeronáuticos.

 

En cambio, contó con la presencia de sus alfiles políticos como Chilavert, el ex arquero de Vélez, devenido en empresario y frustrado candidato presidencial de Paraguay, además del peluquero Fabio Cuggini, a quien Ritondo postula para la intendencia de Morón, lejos de sus dominios.

 

Pertenecer tiene sus privilegios y Ritondo lo hizo saber a su modo: el sushi que se sirvió tras su acto de lanzamiento fue en el primer piso del Golden y solo para la primera línea macrista y su propio séquito.

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