Acá se habla de memoria, verdad y justicia pero no se dice que el Liceo forma ciudadanos útiles a la sociedad

El candidato a senador nacional por Cambiemos y ex presidente de la nación, Julio Cobos, se pronunció en contra de la señalización de cinco lugares de detención clandestina durante la última dictadura cívico-militar en Mendoza, marcación llevada a cabo la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación, a través de la Dirección Nacional de Sitios de Memoria.

Uno de esos lugares tristemente emblemáticos es el Liceo Militar General Espejo, del que es egresado Cobos, como la mayoría de los gobernadores y dirigentes de alto rango de las últimas décadas en esta provincia.

“Es fundamental que esto no se preste a confusiones porque corremos el peligro que, con esta señalización, se estigmatice a los chicos y chicas que actualmente estudian allí y por el otro, a una institución educativa muy prestigiosa y reconocida por su nivel académico”, se quejó el ex vicepresidente de la Nación, en la misma sintonía que algunos padres, cadete y ex cadetes del establecimiento militar.

En 2011 se promulgó la ley 26.691 de preservación y señalización de los ex centros clandestinos de detención para hacer visible la función que cumplieron durante el terrorismo de Estado y expresar en el espacio público el compromiso del Estado democrático de dar a conocer y condenar aquellos crímenes, impulsar el juzgamiento de sus responsables y hacer efectivo el reconocimiento a las víctimas y sus familiares.

En este sentido, Cristian Bassin, ministro de Desarrollo Social de Mendoza, opinó que “no hay que negar la historia” y que hacerlo es un “acto de inmadurez. Esto ocurrió y por eso lo señalizamos. Acá está el dolor de muchos hijos, es un bagaje de mucho dolor. Debe entenderse que esto no es contra tal o cual persona sino que se trata de un acto de memoria, verdad y justicia, cuyo objetivo es el ‘Nunca Más’”.

La delegada de la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación, Natalia Brite, añadió que estas “marcas” son para la difusión y el conocimiento de la historia. “Estar señalando este lugar es emocionante y nos proyecta en cuanto a lo que queremos para la democracia”.

“Acá se habla de memoria, verdad y justicia pero no se dice que el Liceo forma ciudadanos útiles a la sociedad. No hace falta marcar esto, 39 años después”, dijo Gabriel Cabrera, ex cadete y padre de un actual liceísta. Además, dijo que son conscientes de que hubo hechos de violencia en el lugar pero que si es por eso, “en la casa Rosada, en nombre de la memoria, está colgado un cuadro de un asesino como el señor (Ernesto ‘Che’) Guevara”.

Además del Liceo, donde funcionó durante la dictadura un  centro de detención clandestino, se marcaron en la capital mendocina el Hospital Militar (que funcionó como centro de apoyo sanitario para la represión ilegal), el Casino de Suboficiales (donde se detuvo principalmente a mujeres militantes), la Compañía de Comunicaciones de Montaña 8 (centro de tortura) y el ex CCD Campo Las Lajas, en el predio de la IV Brigada Aérea, en la ciudad de Las Heras.