“El kirchnerismo tiene una fortaleza propia. Debe tener un 20 o un 25 por ciento. Tiene un aparato desplegado en todo el territorio nacional muy importante.

El senador peronista Adolfo Rodríguez Saá reiteró que su salida de la Presidencia de la Nación en 2001 se debió a un complot del Grupo Clarín en asociación con quien fue su sucesor, Eduardo Duhalde.

Refiriéndose a esos días de diciembre del 2001, Rodríguez Saá consideró que fue “la semana más difícil de la Argentina. Cuando yo asumí estábamos en la anarquía y cuando dejé, estábamos encarrilados institucionalmente. Basta ver las imágenes de la época”.

En entrevista con el diario santafecino La Capital, el ex gobernador de San Luis denunció que el entonces presidente de la Cámara de Diputados de la Nación, el duhaldista Eduardo Camaño, y la actual diputada de UNEN, Victoria Donda, prendieron fuego la puerta del Congreso, antes de su renuncia: “La incendiaron Camaño y Duhalde. Y la diputada Donda, en el diario La Capital, en un reportaje que le hicieron en 2007, dice claramente que quemaron las cortinas del Congreso de la Nación en combinación con el presidente de la Cámara de Diputados, Eduardo Camaño”.

En este contexto, se dio el siguiente intercambio con el periodista Walter Palena:

—¿Quién fue el que más conspiró contra su gobierno?

—Duhalde y el diario Clarín, que debía 3.800 millones de dólares y se vio beneficiado cuando pesificaron la deuda.

—Los gobernadores peronistas que le hicieron el vacío, ¿también fueron apretados por Clarín?

—Eso hay que preguntárselos a ellos.

—¿Usted nunca les preguntó a algunos de ellos?

—Sí, hablé con De la Sota hace poco. Pero eso es el pasado, ya está en el pasado. Nosotros tenemos que mirar la Argentina con generosidad y amplitud, y con la capacidad del perdón.

Antes, Rodríguez Saá había reiterado su propuesta de participar de una interna con el diputado nacional Sergio Massa y el gobernador cordobés José Manuel de la Sota, y advirtió a la oposición que el kirchnerismo sigue siendo fuerte: “El kirchnerismo tiene una fortaleza propia. Debe tener un 20 o un 25 por ciento. Tiene un aparato desplegado en todo el territorio nacional muy importante. También tiene un sistema prebendario y asistencialista importante, y tiene cautivo a muchos gobernadores e intendentes que le rinden en votos. El kirchnerismo va a dar que hablar todavía, no está muerto ni rendido. Por eso yo llamo la atención a los líderes y a los dirigentes porque la elección no está ganada”.

El padre del default de 2001 llamó a “no enfrentar” al juez norteamericano Thomas Griesa y calificó de pésima la negociación que lleva adelante el gobierno nacional con los fondos buitre. Aunque al final no pudo proponer algo distinto:

—¿Cómo encararía usted la negociación?

—Es muy difícil, porque está todo embarullado. Pero no estoy de acuerdo en nada de lo que hizo el gobierno con este tema.

A principios de agosto, Rodríguez Saá ya había acusado al Grupo Clarín de haber desestabilizado su corto gobierno de inicios de siglo para luego obtener de Duhalde la “pesificación asimétrica”, que le aseguró licuar sus deudas en dólares.