"El Estado nos ha dado una mano grande para ponernos en marcha. Ahora nos hace falta que nos dé un empujoncito más para dejar de preocuparnos por perder el hotel

Trabajadores, militantes, sindicalistas y políticos de distintas extracciones acompañaron por la tarde a los 130 trabajadores de la cooperativa Buenos Aires Una Empresa Nacional (Bauen), que se oponen al desalojo del hotel.

El festival contó con la participación de bandas como La Beriso y Killer Trip, que convocaron a cientos de personas a sumarse al reclamo, sobre el escenario montado sobre la avenida Callao frente al hotel, que fue transmitido en vivo por radio Gráfica y Frecuencia Zero.

Federico Tonarelli, vicepresidente de la cooperativa, contó que "la causa judicial por el desalojo sigue el mismo camino que desde 2003, porque la Justicia ordenó restituirle el inmueble a los propietarios".

"Por eso hacemos este festival, para visibilizar el problema ante las autoridades, y para que la Justicia vea que desalojar a un grupo de trabajadores que hacen viable este emprendimiento no tiene sentido", sostuvo.

Tonarelli puntualizó que si bien "los antiguos propietarios aseguraron en alguna audiencia que nos ofrecen puestos de trabajo y mantener funcionando el hotel", nadie garantiza que los dueños "liquiden el hotel a los tres meses".

Una extensa resistencia

Horacio Lalli, quien era uno de los recepcionistas del BAUEN y también fue uno de los 17 trabajadores que ocuparon el edificio de Corrientes y Callao en 2003, aseguró que el cierre "nos dejó a todos en la calle, todo un síntoma de ese 2001 en que De la Rúa terminó escapando en helicóptero".

"En 2003 cuando ocupamos el hotel encontramos todo en ruinas, y nos llevó más de un año de trabajo ponerlo en condiciones. En ese momento éramos 17 y hoy somos 130, me parece que esa es una muestra clara de que con trabajo la cosa funciona", recordó.

"El Estado nos ha dado una mano grande para ponernos en marcha, porque nos dieron el orgullo de que la mayoría de los chicos del interior que vinieron a conocer Tecnópolis se alojaron con nosotros. Ahora nos hace falta que el Estado nos dé un empujoncito más para dejar de preocuparnos por perder el hotel", apuntó Lalli.

Norberto Pianelli, secretario General de la Asociacion Gremial de los Trabajadores del Subte y Premetro, se solidarizó con los trabajadores. "El desalojo de esta cooperativa es un verdadero disparate de la corporación judicial, nadie que vea lo que estos trabajadores hicieron en este tiempo en el hotel puede sacarlos de acá, y menos para dárselo al vaciador", sostuvo.

Por su parte, el legislador porteño de Nuevo Encuentro, José Campagnoli, recordó que "en diciembre de 2001 se cerraron las puertas del hotel, dejando en la calle a cientos de trabajadores". El dirigente, que presentó un proyecto para que la Legislatura tome parte en el conflicto, sentenció: "No podemos permitir que el fallo de la justicia ponga en riesgo 130 puestos de trabajo".