Las clases presenciales quedan suspendidas en la semana desde el 3 hasta el 7 de mayo, inclusive en los departamentos Rosario y San Lorenzo, zonas categorizadas por el Gobierno nacional como en «alarma epidemiológica».

Por eso, Fernández días atrás anunció la suspensión de las clases presenciales hasta el 21 de mayo, a lo que adhirió Perotti, pero tan solo por 7 días.

Perotti marcó que, durante la primera ola un máximo de tres mil contagiados diarios llevó al sistema sanitaria a mantener un 95% de camas ocupadas, la misma cantidad que ahora con cerca de 2 mil casos por día.

El gobernador destacó que a partir de las restricciones adoptadas diez días atrás “se consiguió mermar esa suba, pero estamos alto, y ahora hay que bajarlo”. “Por eso ahora vamos a una segunda etapa de restricciones”, continuó.

Actualmente Santa Fe cuenta con dos departamentos en «alto riesgo epidemiológico» y dos están en «alarma epidemiológica». Pero el Gobierno de Santa Fe envió una carta al jefe de Gabinete Omar Perotti, al considerar que esos criterios deben ser «reanalizados» en función de las particularidades de cada distrito y de nuestro sistema sanitario.

Perotti se encargó de dejar en claro su intención de dictar clases presenciales: “Santa Fe se preparó para que los chicos vuelvan a la escuela. Más de 500 mil chicos quedaron desvinculados en la primera ola. Preparamos los establecimientos educativos y los protocolos. Además de vacunar al 98% de los docentes de todos los niveles, tanto del sector público como del privado. Eso marca nuestra intención de tener clases”.

“Es por eso que vamos a suspender las clases solamente por siete días. En el resto de los departamentos vamos a tener clases normalmente”, detalló Perotti.

El gobernador hizo alusión al plan de incorporación de camas en el sector público y privado, y reclamó la llegada de respiradores comprometidos por el Gobierno nacional.

Este lunes habrá una reunión entre el gobernador y los intendentes para evaluar la situación epidemiológica.