En un esfuerzo por abordar las preocupaciones sobre el bienestar financiero de los jubilados y pensionados, el Gobierno ha anunciado una serie de medidas que buscan proporcionar alivio en medio de la creciente inflación que enfrenta el país. Conforme a la ley de movilidad jubilatoria, se ha revelado que a partir del próximo mes de septiembre, se implementará un incremento del 23,29% en las jubilaciones, pensiones y asignaciones familiares.
Redacción EnOrsai // Domingo 13 de agosto de 2023 | 00:33
El Ministro de Economía, Sergio Massa y la titular de la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES), Fernanda Raverta, anunciaron este jueves un aumento del 23,29% en las jubilaciones, pensiones y asignaciones familiares desde septiembre, conforme la actual fórmula de movilidad previsional. El haber mínimo, sin el bono, pasará a ser de $87.489. Hasta hoy, la jubilación mínima era de $70.938 en bruto.
Además ANSES anunció que pagará bono de $27.000 para los jubilados de la mínima por los próximos tres meses. Por lo cual “ningún jubilado cobrará menos de $114.460?, afirmó la directora del organismo. Por si esto fuese poco, también confirmaron que el haber de las y los jubilados de la mínima que se jubilaron con los 30 años de aportes efectivos (1,2 millones de personas) quedará en $123.760.
Este aumento, el cual representa un paso hacia la protección de los ingresos de los jubilados, se suma a la introducción de un bono o refuerzo adicional que se otorgará en los meses de septiembre, octubre y noviembre. Este bono, fijado en 27,000 pesos, actuará como un complemento esencial para garantizar que ningún jubilado o pensionado reciba menos de 114,460 pesos durante este período.
La asignación universal por hijo y la asignación por embarazo también serán objeto de un incremento significativo, ascendiendo a 17,093 pesos. Estos ajustes apuntan a aliviar la carga financiera de aproximadamente diecisiete millones de personas, brindándoles un mayor nivel de seguridad en sus ingresos en medio de un contexto económico desafiante.
Cabe destacar que aquellos jubilados que han mantenido una contribución continua durante treinta años y han evitado moratorias, recibirán un aumento aún mayor. Para esta destacada población, el incremento mensual llegará a 123,760 pesos, lo que refleja el compromiso del Gobierno en reconocer el esfuerzo y la dedicación de aquellos que han cumplido con sus obligaciones.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que estas medidas, si bien significativas, podrían enfrentar desafíos en el futuro en medio de un entorno económico incierto. La inflación, que ha sido un tema dominante, continúa planteando preocupaciones y podría influir en la efectividad de estas políticas a largo plazo.
Además, la posibilidad de otorgar una suma fija o bono adicional en el futuro sigue siendo objeto de debate y se espera que sea abordada en las próximas discusiones. Esta decisión podría tener un impacto directo en la capacidad de los jubilados para cubrir sus necesidades básicas y mantener una calidad de vida digna.
El anuncio del aumento jubilatorio y los bonos de refuerzo es un paso en la dirección correcta para asegurar el bienestar de los jubilados y pensionados en un momento de creciente incertidumbre económica. Sin embargo, los desafíos persistentes de la inflación y las medidas adicionales que puedan implementarse en el futuro determinarán en última instancia el éxito y la efectividad de estas medidas.