(Por Walter Onorato - @walteronorato) Por este motivo Larreta debió reconfigurar su agenda ante lo que se estaba observando en todos los medios y para evitar un abucheada generalizada se trasladó a la ex sede del ejecutivo que se encuentra ubicada frente a la Plaza de Mayo. En ese lugar, mientras los abuelos seguían haciendo largas filas bajo el sol, el jefe porteño mantenía reuniones con algunos de sus ministros, entre ellos Fernán Quirós.

Concretamente fueron las serias fallas en la organización lo que provocó grandes demoras en la atención en los centros del Luna Park y San Lorenzo en Boedo. Los testimonios de los adultos mayores que debieron esperar más de tres horas, en la vereda, sin lugar donde sentarse, bajo el sol donde algunos se descompensaron y debieron ser asistidos por personal médico y de la policía fueron demoledoras. La conclusión no requiere de mucho análisis, el equipo de Larreta no pudo “gestionar” y organizar correctamente una jornada de vacunación.

El primero que debió dar la cara por el bochornoso momento fue Gabriel Battistela, el subsecretario de Atención Primaria, Ambulatoria y Comunitaria del Ministerio de Salud de la CABA. En dialogó con la ultramacrista Radio Rivadavia, en el programa de Jonatan Viale expresó que “a los treinta puestos, se le sumaban una o dos personas que acompañaban al adulto mayor y se acumularon varias personas”, agregando que “no hace falta llegar con tanta antelación.”

Más tarde fue el propio Fernán Quiroz quien salió telefónicamente a dar una explicación en el espacio cedido por TN. "El problema no es el vacunatorio, el problema fue la cantidad de acompañantes y la cantidad de anticipación a los turnos que hizo que durante las primeras horas de la mañana el conglomerado de gente sea muy importante."

CAMBIEMOS Y LAS DISCULPAS.

Las disculpas no generan políticas públicas ni reparación.
Gestionen para que los médicos, adultos mayores y docentes tengan su vacuna sin tratarlos como descartables.

— Natalia Salvo (@NataliaBSalvo) March 10, 2021

Quirós agregó que habían "dispuesto bloquear los espacios externos a los lugares y asignar ocupar el espacio público sobre todo para ordenar las filas, que fue un gran tema porque a veces una persona mayor venía mucho tiempo antes y estaba mezclada con la que tenía que entrar inmediatamente."

Otra excusa ensayada por el gobierno porteño, dadas a la Agencia de Noticias Télam, fue echarle la culpa a la vacuna Sputnik. Fue el "error de previsión" en el diseño del nuevo esquema de vacunación, que pasó de contar con 29 sedes a cuatro, entre la semana pasada y la actual. Esto se debió, según el gobierno porteño, a que "antes se aplicaron las dosis de Astrazeneca y ahora se aplican las de Sputnik V, que necesitan de un nivel de frío específico y un manejo especial, y no todos los lugares tenían los cuidados para esa maniobrabilidad".

Se debe mencionar que el Defensor del Pueblo, Alejandro Amor, debió “enviar un oficio al subsecretario de Atención Primaria, Ambulatoria y Comunitaria del Ministerio de Salud de la CABA, Gabriel Battistella, tras los hechos producidos en el Luna Park y en el estadio de San Lorenzo de Almagro, donde cientos de adultos mayores debieron esperar en largas filas bajo el rayo del sol para inmunizarse contra el coronavirus.”

"Quirós le echó la culpa a los acompañantes de los adultos mayores. Es un mentiroso serial"

• #Ahora • El editorial de @VHMok

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— Radio AM 750 (@AM750) March 10, 2021

Se le pide al funcionario porteño que explique, las razones por las cuales se produjeron los hechos; las medidas que se tomarán en adelante para que en las siguientes postas de vacunación no se repitan los hechos denunciados y se garanticen condiciones acordes a las necesidades y los derechos de las personas mayores.

También se pide que expliquen en relación a las personas discapacitadas: “Si se les habría dado alguna prioridad para la dación de turnos, y qué dispositivos se habría puesto a disposición para garantizar la accesibilidad al centro de vacunación contemplando los medios de desplazamientos adecuados”.

Como conclusión sólo podemos decir que no hubo una autocrítica elaborada por el Gobierno porteño. Para Quirós y Battistela la culpa fue directamente de los abuelos que fueron acompañados y por asistir antes de horario. Con estos “datos duros” del día de ayer se cayeron dos grandes mitos. El primero de ellos es que el Larretismo, como funcionarios, son grandes administradores o que “gestionan bien”. El segundo mito que quedó destruido fue la idea que el blindaje mediático de Larreta con su pauta publicitaria es inexpugnable.

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