Con el objetivo político de apuntar a un sistema previsional solidario y redistributivo, por primera vez en décadas, en un Estado en absoluta crisis, dejaran de sufrir y de ser variables de ajustes los sectores más vulnerables.

El presidente Alberto Fernández anunció un aumento del 13% en los haberes mínimos de jubilados y pensionados, la Asignación Universal por Hijo (AUH) y demás Asignaciones Familiares, que regirá a partir de marzo.

Vamos a seguir tratando de cumplir todas las obligaciones de nuestro país, pero no a costa de los que menos tienen, dijo Alberto.

El aumento será de $1.500, que quedará incorporado en el haber, más un extra de un 2,3% para todo el universo de jubilaciones y pensiones. De esta forma se logra un aumento más distributivo, equitativo y solidario.

El objetivo es beneficiar a los sectores más vulnerables de la sociedad. De esta manera quienes hoy perciben la mínima lograran un incremento equivalente al 13%. En términos nominales, la jubilación mínima de $14.068 desde marzo será de $15.891.

En términos generales, el 75% de las jubilaciones y pensiones aumentaran en marzo más de lo que hubiesen aumentado con la fórmula de movilidad jubilatoria suspendida. Con este aumento la jubilación media también superará a la inflación proyectada del primer trimestre del año, representando una suma de más de $2.000.

BENEFICIARÁ A 16 MILLONES Alberto cumple su promesa de campaña y se volverán a entregar remedios gratuitos

El 87% de los beneficios tendrá un aumento igual o superior al 8%, en línea con la inflación que se proyecta para el primer trimestre de este año.

Sumado el bono de $5000, en diciembre y enero, además de la mejora del 13% que tendrán los haberes mínimos, mensualizando este bono, los haberes de la Mínima aumentarán un 15,9% en marzo.

En línea con las promesas de campaña del Presidente Alberto Fernandez, también se están entregando desde el gobierno nacional las tarjetas alimentarias por montos de hasta $6.000. Esta medida busca luchar contra el hambre y la pobreza de los niños y niñas de nuestro país.

En 2019 en desempleo sobrepasó los dos dígitos (llegó a 10,6% en el segundo trimestre del año), la inflación cerró el año con un 53,8% (el doble de la inflación de 2015) y la pobreza superó el 35%.

Estas variables fueron de la mano de un modelo económico excluyente, de endeudamiento, especulación y fuga. La deuda alcanzó el 91,7% del PBI en el tercer trimestre de 2019 y desde diciembre de 2015 se fugaron más de 88 mil millones de dólares. Gran parte de este agujero fiscal llevo al Anses a un desfinanciamiento que afectó estrepitosamente al organismo.

No puedo dejar de hacer un comparativo con la ley de movilidad del Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner y La fórmula de movilidad que se aplicó desde fines de 2017 (y ahora se encuentra suspendida) de Mauricio Macri.

La fórmula suspendida por la ley 27.541 hubiera incrementado los haberes un 116,6%, mientras que, con la fórmula de Cristina los haberes hubiesen aumentado un 124,6%.

Desde septiembre de 2009 a septiembre de 2015, las jubilaciones aumentaron un 23% en términos reales con la fórmula de Cristina. Desde septiembre de 2017 a diciembre de 2019 las jubilaciones perdieron un 19,5% en términos reales con la fórmula de Macri.

El siguiente cuadro ilustra los aumentos de una formula y de otra.

Con el objetivo político de apuntar a un sistema previsional solidario y redistributivo, por primera vez en décadas, en un Estado en absoluta crisis, dejaran de sufrir y de ser variables de ajustes los sectores más vulnerables.