(Por: Nicolás Magginicolasmaggi@hotmail.com) El cinturón aprieta cada vez más. La inflación no baja, las tarifas suben a niveles estratosféricos y son cada vez más los que deben decidir entre pagar deudas o poner un plato de comida en la mesa. Así lo reflejan los datos revelados por la Oficina de Defensa de Consumidor de Rosario, que no para de recibir pedidos de "planes de pago" para regularizar deudas, y reclamos por “hostigamiento telefónico” por parte de clientes que demoraron el pago de la tarjeta de crédito.

Los cambios en la macroeconomía afectaron sin dudas el mapa de reclamos que recibe el organismo. Históricamente, Telefonía Fija y Móvil fue el área con mayor cantidad de denuncias, hasta que en los dos últimos años fue superado por Vivienda e Inquilinos. Pero este año las quejas y consultas del área financiera encabezan el ranking, mayormente porque mucha gente no puede abonar las cuotas de préstamos personales o tarjetas de crédito. Otros reclamos que son percibidos por el mismo departamento son los pedidos de baja de tarjetas no solicitadas o el desconocimiento de compras, en especial las facturadas bajo modalidad online.

Endeudados

Puntualmente, este año se vio un incremento en la solicitud de planes de pago para refinanciar deudas. En 2017 fueron 113 en todo el año, pero en los primeros cuatro meses del 2018 ya suman 60. "Los rosarinos se endeudan, sacan electrodomésticos y compran en el supermercado y después no pueden abonar la tarjeta. La gente va priorizando qué pagar y que no según su capacidad, y mientras tanto la tasa de interés sigue corriendo", detalló a El País Digital Ariadna Ciammariello, responsable del área Financiera de la dependencia.

Otro factor que interviene en este incremento es para Ciammariello la falta de información que provee la entidad bancaria. “El banco te dice que abones el mínimo, pero es un arma de doble filo porque siempre pagás interés y no capital. Como no se te inhabilita la tarjeta, en tres meses se te duplicóo triplicó la deuda, y esto la gente lo desconoce”, explicó. Además, señaló que “muchas veces uno tiene débito automático en la cuenta sueldo, que solo descuenta el mínimo.Entonces uno se queda tranquilo pensando que su tarjeta está siendo pagada, y se va acumulando lo que debe hasta que se convierte impagable”.

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La coordinadora de Atención al Público relató cuáles son los pasos a seguir cuando reciben una consulta de este tipo, por parte de gente que dejó de abonar las cuotas o discontinuó el pago porque algunos meses puede hacerlo y otros no le alcanza. “Lo que hacemos es pactar con el banco cuánto se debe, en cuántas cuotas se puede hacer y cuáles la voluntad o capacidad de pago del consumidor para que la deuda quede congelada y no se generen más intereses”.

Apretadores a sueldo

En tanto, la asesora manifestó que se multiplican en la Oficina los reclamos por “hostigamiento telefónico” por parte de agencias de cobranza que son contratadas por las empresas que ofrecen créditos o productos en cuotas para atemorizar a los morosos e inducirlos a que regularicen su situación.

“Esto se ve siempre en la oficina, puede ser que tu deuda sea legalmente exigible,o puede ser que por el paso del tiempo esté prescripta. En ese caso aparecen estos pseudo estudios jurídicos que llaman a tu domicilio a cualquier hora, a vecinos y a familiares, envían notas que dicen«último aviso», «embargo», o que van a rematar tu casa o secuestrar los bienes de tu domicilio. La gente se asusta y paga”, afirmó la coordinadora, quien reveló además que las firmas ni siquiera son de Rosario, sino que sus domicilios están en Buenos Aires, Entre Ríos, Chaco o Mendoza.

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En ese sentido, aclaró que los llamados telefónicos de estas empresas no tienen valor legal, ya que siempre se necesita una notificación por escrito: “Si tu deuda es exigible quien primero te va a reclamar es el banco, luego enviarán una carta documento o certificada, y finalmente una cédula judicial. El resto no es legal,está prohibido por la ley 24.240”.

Ciammariello argumentó que “no se informa cuánto es el capital, cuál es la mora, qué tasa de interés aplican. No tiene ningún fundamento y se basan en deudas que ya prescribieron”. Por ello, si alguien recibe este tipo de reclamos por teléfono o en papel, recomendó no asustarse y concurrir a asesorarse a la Oficina Municipal de Defensa del Consumidor, ubicada en Córdoba 852, de lunes a viernes de 8 a 16.  Fuente: elpaisdigital.com.ar