Llegaron los primeros 25 telegramas de despido y los empleados cerraron las puertas y se manifestaron internamente. Todavía hay pacientes y cada vez hay menos médicos.
Viernes 01 de diciembre de 2017 | 17:47
La Clínica Estrada de Lanús tiene abierta sólo la entrada de guardia, en donde no hay recepcionistas ni médicos. Quienes entran no tienen más opción que irse a otro centro de salud, porque los empleados permanecen en asamblea permanente desde que este jueves llegaron los primeros 25 telegramas de despido “al azar”, en medio de rumores de quiebra.
Mientras tanto, mantienen parcialmente sus actividades sólo para darle una “atención mínima” a los 30 pacientes que se encuentran en el establecimiento, por suerte ninguno en estado de gravedad.
Médicos, enfermeros y otros trabajadores desconsolados.
— Pablo Lapuente (@PabloLapuente) 30 de noviembre de 2017
Cerró la Clínica Estada de #Lanús. pic.twitter.com/ne7U3EESGX
La situación era anticipable ya que “desde hace seis meses que hay rumores de que la empresa quiere presentar la quiebra”, señaló uno de los empleados al diario Perfil. “Primero empezaron los recortes de insumos y ahora esto”, especificó.
El empleado narró cómo llegaron los despidos, todos con la misma razón: “No hay trabajo”. “Presentaron 25 telegramas de despido y no sabemos si van seguir llegando más”. Aunque se descuenta que serán cesanteados los casi 350 trabajadores.
Ricardo bianco, el dueño de la clínica es un ferviente adherente (?) de Cambiemos fana de María Eugenia Vidal.
Por su parte, uno de los delegados de la Asociación de Trabajadores de la Sanidad Argentina (ATSA) detalló que los despidos fueron “a dedo” y que tuvieron que reunirse con un representante del Ministerio de Trabajo de la ciudad y la dueña de la clínica, Miriam Solá.
“Dijeron que revisaría algunos de los despidos y que mañana habrá un nuevo parte”, confiaron a este medio, y advirtieron que además reclaman la falta de pagos desde octubre: “Nos deben el 50% de octubre”.