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La reunión secreta de los soldados de Cristina, a quienes quieren sumar y las batallas que imaginan

A solo nueve meses de irse del gobierno esta mañana empezaron a darle forma a una especie de Comando Central del kirchnerismo en una quinta de la Zona oeste del Gran Buenos Aires.

La reunión secreta de los soldados de Cristina, a quienes quieren sumar y las batallas que imaginan

Javier Romero // Jueves 13 de octubre de 2016 | 22:30

No se está fundando nada, porque esta fuerza nació el 25 de mayo de 2003

La convocatoria estuvo centralmente en manos de Máximo Kirchner, Agustín Rossi, Martín Sabbatella (el anfitrión), Coqui Capitanich, Victor Santamaría y Jorge Ferraresi.

A la reunión también asistieron Edgardo Depetris (Frente Transversal), Leopoldo Moreau (alfonsinismo), Luis D´Elía (Miles), Gabriel Mariotto, el intendente de Ensenada Mario Secco, el funcionario de Santa Cruz Carlos Castagnetto, el socialista Jorge Rivas, Héctor "Gallego" Fernandez (Peronismo Militante) y el diputado Carlos Heller.

La idea de los jefes de las distintas organizaciones y referentes del kirchnerismo es organizar el espacio que lidera Cristina y articular una estrategia común frente a las elecciones del año próximo.

El carácter secreto de la reunión tiene que ver fundamentalmente con no herir susceptibilidades y, antes de dar a conocer el armado sumar a todas las expresiones políticas, sociales, gremiales y territoriales que se sienten identificados con las políticas del kirchnerismo y reconocen el liderazgo excluyente de Cristina.

Cada uno de los asistentes quedó en terminar de referenciar a quienes deben convocar de manera transversal y federal.

Unos se encargarán de terminar de acercar intendentes, como Patricio Mussi de Berazategui o Paco Durañona de San Antonio de Areco o los referenciados en La Cámpora como el de Moreno Walter Festa o el de Mercedes Juan Ustarroz.

Se habló tambien del mendocino Guillermo Carmona de Mendoza, Ruperto Godoy de San Juan o Blanca Osuna de Entre Ríos, entre otros.

También se propuso invitar a próximos encuentros a dirigentes de las CGT Regionales, de mucha actividad en las últimas protestas antimacristas, al lider la CTA Hugo Yasky, al jefe del gremio bancario Sergio Palazzo entre otros.

E invitar a dirigentes estudiantiles, ya que muchas organizaciones referenciadas en el kirchnerismo dieron resonantes batacazos en distintas universidades a lo largo y a lo ancho del país.

De todos modos, uno de los principales desafíos que deben afrontar es como atraer y contener los nuevos espacios que abrazaron la militancia a partir de la pelea por la segunda vuelta electoral a fines del año pasado, que solo reconocen el liderazgo de Cristina y a los que, por comodidad intelectual se los denomina, kirchnerismo salvaje.

Se muestran sobre todo en las redes sociales, organizan charlas y plazas públicas acompañan a Cristina adonde vaya (Aeroparque, Universidades y hasta Comodoro Py) y están, hoy por hoy fronteras afuera de las organizaciones conocidas.

La idea fuerza es la búsqueda del campo nacional para ganar en el 2017 y recuperar el gobierno del 2019. Para eso saben que deben sentarse a negociar con el resto del espacio que hoy por hoy se cobija en los caudillajes provinciales, o en sellos como los grupos Esmeralda, Fénix o El Establo que agrupan dirigentes, fundamentalmente del peronismo bonaerense.

A la hora de la negociación cuentan con una carta fuerte: Cristina es hoy por hoy la única dirigente con ascendente nacional. Hay fuertes liderazgos regionales, es cierto, como Gioja en San Juan, o Martín Insaurralde en Lomas de Zamora, por poner dos ejemplos, pero ninguno de ellos, ni otro tiene la potencia territorial de Cristina o del kirchnerismo en cada uno de los rincones del territorio nacional.

De todos modos se apuran en aclarar que la idea es no ser sectarios en la construcción, que la idea es anteponer la discusión programática por delante, "para volver mejores, como dice Cristina".

También aclaran que "no se está fundando nada, porque esta fuerza nació el 25 de mayo de 2003", en referencia a la fecha de asunción de Néstor Kirchner a la presidencia de la Nación, y que la idea es acordar con el resto del espacio nacional y popular un "plan común en la pelea cotidiana contra el ajuste de Macri".

"Vamos a crecer", dicen "en la defensa de los derechos del pueblo, en la comparación natural que la gente hace diariamente sobre como se vivía antes y como se vive ahora. En la valoración de los 12 años y medio de gobierno y sobre todo en la confianza de la conducción de Cristina".

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