Para mí lo que buscaron y lograron es generar miedo y pánico en la gente

El fin de semana, una brutal represión se desató contra los jóvenes que se encontraban ensayando con una murga en el Bajo Flores. Cuando la Gendarmería y la Federal pidió pasar por la calle por la cual se encontraban el director de la murga pidió unos minutos para desalojar la calle.

Inmediatamente los uniformados comenzaron a disparar contra los niños que estaban bailando. Ahí se produjeron unos 16 heridos que recibieron las municiones de goma, mientras que un chico recibió un disparo de plomo en una pierna. A causa del accionar represivos, dos chicos debieron ser internados por las heridas.

La justificación de las Fuerzas de Seguridad para desatar la represión fue que se encontraban persiguiendo a dos ladrones de autos que habían ingresado al barrio.

En el portal Notas le realizaron una entrevista a Leonardo Demonty, hermano de Ezequiel un chico asesinado por la Policía cuando lo obligaron a cruzar el Riachuelo nadando en 2002. El militante relató que “el viernes cuando aparecieron un patrullero de Gendarmería y una camioneta de la Policía Federal. Vinieron a buscar dos supuestos autos robados que habían dejado ahí tirados”.

Y agregó que “en ese momento estaba practicando la murga y vinieron de prepo diciendo que querían pasar si o si por ahí. El director de la murga se acerca y les pide que esperen que corra a los chicos porque estaban todos bailando. Es ahí que baja un agente del patrullero y le tira un itakazo con balas de goma al director de la murga en las piernas”.

“Para mí lo que buscaron y lograron es generar miedo y pánico en la gente. Ellos gritaban: “Negros de mierda”; “Villeros de mierda”; “Hay que matarlos a todos”. Esas eran las palabras que usaban, mucha discriminación”, sostuvo.