La oposición mediática, política y económica jugó fuerte a pocas horas de las PASO. A las movidas sobre el dólar, se sumó una acusación combinada de Lanata, Clarín y Carrió contra Aníbal, en base a los dichos de un narco. La jugada parece haber entrado en crisis.
Andrés Brown Redacción En Orsai // Miercoles 05 de agosto de 2015 | 16:10
"Debo reconocer que esta semana hemos batido récords en materia de originalidad de denuncias, porque desde lo que parece ser la casa de una diputada nacional, también candidata a presidenta, casi un aguantadero, porque uno ve eso y dice…yo no sé, pero yo en mi casa jamás metería a alguien que esta procesado por narcotráfico además si hago eso me meten presa a mí por cómplice”, lanzó Cristina en una clara referencia a Elisa Carrió.
Así, tras la insólita y fallida operación que montó el Grupo Clarín junto con Elisa Carrió y Jorge Lanata, la Presidenta de la Nación respaldó al Jefe de Gabinete de Ministros y precandidato a gobernador por cadena nacional.
La fuerte jugada del Grupo Clarín entró en crisis pocas horas después de haberse echado a andar. Luego de que se descubriera que la entrevista de Jorge Lanata a José Luis Salerno (el involucrado en la causa por el triple crimen de la efedrina que denunció a Aníbal Fernández) se hizo en la casa de la diputada nacional Elisa Carrió, desde la Coalición Cívica tuvieron que admitir que el dato era cierto.
Primero lo hizo la propia Carrió y hoy se sumó su mano derecha, el también diputado Fernando Sánchez. “La casa de Carrió era el lugar más seguro, no solamente para quien estaba brindando testimonio sino también para quien estaba recibiendo el testimonio y lo hacía en carácter de funcionaria federal, que es Elisa Carrió”, planteó Sánchez.
Después, tampoco pareció funcionar la denuncia de Lanata, quien manifestó haber sufrido un ataque en su casa.
Pero la Policía Federal informó que se trató solo de una pelea entre indigentes que tiraron piedras. Así lo informó la fuerza de seguridad en un acta en la que confirma que los supuestos ataques contra el edificio en el que vive el operador en realidad fueron piedras lanzadas por un indigente.
La Policía detalló que la administración del edificio denunció que en horas de la tarde del lunes hubo una pelea de individuos en situación de calle con custodios de una empresa de seguridad privada en las puertas del inmueble, que terminó con varias pedradas contra la garita de seguridad.
Por último, las movidas especulativas para que suba el dólar ilegal no se traducen en inflación ni en una devaluación por parte de gobierno.